La demanda en esta cadena de tiendas minoristas, la mayor del mundo, fue iniciada en 2001 por seis mujeres que denunciaron discriminación, pero terminaron siendo 1,6 millones de empleadas o exempleadas que exigían un juicio colectivo.
El Tribunal Supremo de EE.UU. rechazó una demanda colectiva por discriminación sexual en Wal Mart, en lo que supone una clara victoria para la empresa en un caso que ha convertido en un símbolo en la lucha contra la discriminación laboral en este país.
La demanda en esta cadena de tiendas minoristas, la mayor del mundo, fue iniciada en 2001 por seis mujeres que denunciaron discriminación tanto en la capacitación como en las promociones y en las remuneraciones, si bien se sumaron a ellas otras 500.000 empleadas.
En un momento determinado del proceso judicial, las demandantes lograron que un juez convirtiera la denuncia en una demanda colectiva, con lo que se hizo extensible a 1,6 millones de empleadas o exempleadas de la cadena.
No obstante, los jueces del Supremo dictaminaron que en este caso no cabía una demanda colectiva, en línea con lo que había argumentado este gigante de la distribución comercial.
"Nos complace el dictamen de hoy y creemos que el tribunal tomó la decisión correcta", señaló en un comunicado la vicepresidenta de Wal Mart, Gisel Ruiz, quien recordó que "Wal Mart ha tenido durante muchos años políticas muy enérgicas contra la discriminación".
La querella, si se hubiese aceptado como demanda colectiva, podría haber conducido a compensaciones e indemnizaciones por miles de millones de dólares.
El juez Antonin Scalia, que escribió el veredicto de 27 páginas, indicó que las demandantes no tenían suficientes razones en común para que las demandas se convirtieran en una sola querella colectiva.
REPERCUSIÓN EN LA BOLSA
El fallo de inmediato benefició a Wal Mart con un aumento de la cotización de sus acciones en la Bolsa de Nueva York.
El caso ha sido una de las disputas recientes sobre relaciones laborales de más relevancia, en parte porque los magistrados del Supremo no habían manejado un caso sobre certificación de demandas colectivas en más de una década.
Más allá de Wal Mart, todo tipo de empresas, especialmente las que aplican algún criterio discriminatorio por razón de raza, sexo, u origen nacional, tenían un interés en este caso.
Entre las firmas que afrontan querellas por discriminación por género y que han tomado forma de demanda colectiva se cuentan la aseguradora Cigna, el banco Goldman Sachs, la farmacéutica Bayer AG, la informática Toshiba y la cadena de distribución mayorista Costco.
Más de 20 compañías expresaron ante el Supremo su respaldo a la posición de Wal Mart, incluidas Intel, Altria Group, Bank of America, Microsoft y General Electric.
Wal Mart, con ventas por 400.000 millones de dólares y ganancias de más de 15.000 millones de dólares el año pasado, tiene 3.400 locales en 41 regiones de Estados Unidos, y cuenta con más de un millón de empleados.
EFE
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