El vehículo fue adquirido a más de 2 mil euros con una donación entregada por el piloto Rafal Sonik, primer ganador del Dakar de origen polaco.
El actor estadounidense Tom Hanks fue sorprendido por la ciudad polaca de Bielsko-Biala con un regalo poco usual. Los representantes del estado, ubicado en el noreste de Polonia, expresaron su deseo de regalarle al intérprete de Robert Langdon en la serie de películas El código Da Vinci, Ángeles y Demonios; e, Inferno, un auto producido en 1974 en esa localidad y muy popular en la Polonia comunista, de serie Fiat 126.
El regalo fue pensado después de que el actor publicase en 2016 una foto junto a ese modelo de carro y bromease escribiendo que tenía nuevo coche. El vehículo fue adquirido este pasado fin de semana en Suwalki por más de 2 mil euros, dinero donado por el piloto polaco Rafal Sonik.
Restauración. El coche ya se encuentra en Bielsko-Biala, donde un taller local se ha comprometido a restaurarlo gratuitamente para hacérselo llegar al actor como nuevo. La restauración, a base de piezas originales, tiene un coste estimado de entre 7 mil y 9 mil euros.
Hanks, conocido aficionado a la automoción, se hizo esa fotografía durante una visita a Budapest, aunque este modelo de Fiat es especialmente popular en Polonia, donde fue el coche más vendido durante gran parte del comunismo y todavía hoy se puede ver circulando por las carreras polacas. "No quisimos dejar pasar esta oportunidad y decidimos regalarle al actor uno de estos Fiat, una forma de que conozca la historia de Polonia y de nuestra ciudad", dijo Monika Jaskólska, portavoz de la iniciativa.
"Se espera que en tres o cuatro meses el vehículo ya esté rehabilitado, y salvo que Hanks decida venir a recogerlo personalmente a Polonia, el plan es enviárselo por transporte aéreo a Los Ángeles", comentó.
Histórico. El Fiat 126, de motor trasero y una velocidad máxima de 105 kilómetros por hora, nació como sustituto del Fiat 500 en 1972. En Polonia, y bajo licencia de Fiat, el 126 se produjo entre 1973 y 2003 en plantas como la de Bielsko-Biala, y con más de cuatro millones de unidades vendidas fue uno de los vehículos más frecuentes en las carreteras polacas durante varias décadas. Hoy el Fiat 126, conocido en Polonia como "Maluch" (pequeño, en polaco), es un coche de culto y parte de la cultura popular de este país.EFE
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