Con doblete de Enner Valencia, Ecuador arrancó con un importante triunfo ante el anfitrión en el Mundial Qatar 2022.
Este domingo, la selección de Ecuador venció por 2-0 a Qatar en el partido inaugural del Mundial Qatar 2022 en un triunfo que tuvo como figura principal a Enner Valencia, autor del doblete y quien sentenció, con mucha justicia, la victoria de un equipo visitante que fue ampliamente superior que el anfitrión en los 90 minutos. Repasemos cuatro claves de esta victoria del elenco dirigido por Gustavo Alfaro en el inicio de la Copa del Mundo.
1. Enner Valencia, hombre gol en momentos clave:
El delantero ecuatoriano de 33 años no esperó mucho para ser determinante. De hecho, abrió el marcador apenas en el minuto 3 del encuentro y, aunque luego fue anulado por un offside solo perceptible por el VAR, demostró una contudencia y buen posicionamiento en el área rival que siguió presente todo el primer tiempo.
En el minuto 16, Valencia volvió a desmarcarse bien de la débil defensa local y el arquero cometió una falta en su contra. Desde los doce pasos y sutilmente, el delantero pudo abrir la cuenta por la vía penal y continuó siendo la principal figura de referencia en el ataque ecuatoriano. Ya en el minuto 31, nuevamente apareció para conectar de cabeza tras un muy buen pase por parte de Ángelo Preciado. Con gran técnica, Valencia terminó colocando el balón esquinado ante el arco qatarí.
Con anotar el 2-0 en favor de Ecuador en el tiempo parcial, el cuadro sudamericano tuvo mayor tranquilidad para afrontar el segundo tiempo y resguardar el resultado. En tanto a lo individual, Enner Valencia tuvo mucho menos protagonismo en este tiempo parcial, ya que sufrió un golpe casi al término del primer tiempo y el resto de minutos que estuvo en la cancha no tuvo la misma incidencia hasta que terminó siendo sustituido en el minuto 76. Valencia fue ese hombre gol que le dio la calma a Ecuador en el momento adecuado y trasladó la imposición desde el juego al marcador.
2. Dominio del mediocampo:
Luego de Enner Valencia, la segunda figura más determinante a partir de la organización de juego fue Jhegson Méndez, el volante ecuatoriano que sirvió de recuperador de pelotas y de alimentador para sus delanteros. A partir de este dominio del mediocampo, acompañado también del buen trabajo de Moisés Caicedo, la defensa en línea de cinco presentada por Qatar se vio bastante controlada ya que, al jugar tan retrasados, la volante ecuatoriana pudo ganarle mucho más espacio a la qatarí y no les permitía salir con claridad. A partir de este dominio en el mediocampo, los ecuatorianos lograron mayor control y chances de generación de juego, sobre todo en el primer tiempo en el que pudieron sentenciar el triunfo.
3. Mejor físico e intensidad:
Ecuador es una de las tres selecciones con menor promedio de edad (25 años) en el Mundial Qatar 2022, junto con Ghana y España, y ese también fue uno de sus puntos altos en el encuentro ante el anfitrión -y seguramente en los que vendrán después-. Ya sea desde el planteo inicial o con los ingresos de las variantes, el cuadro de Gustavo Alfaro siempre se mostró superior físicamente en tanto a intensidad y dejó mal parada a la defensa qatarí en los ataques y contragolpes. Asimismo, tuvo esa tranquilidad y entereza para salvaguardar el marcador en la segunda parte. En este punto, cabe destacar el buen despliegue de los laterales Ángelo Preciado (24 años) y Pervis Estupiñán (24 años) que aportaron mucho en el ataque ecuatoriano por sus respectivas bandas.
4. Oportunidades escasas y poco aprovechadas:
Ya con el resultado en su favor por 2-0, Ecuador fue menos contudente en el primer tiempo y no salió a proponer en exceso. Para la segunda parte, Qatar tuvo algunas pocas oportunidades de asomarse al arco de la 'Tri' pero ninguna fue bien aprovechada y el golero Hernán Galíndez casi no fue exigido. Tentaron con pases de Pedro sobre la banda derecha y rematando desde larga distancia, sobre todo con disparos de Afif, Karim Boudiaf, y una jugada aislada de Muntari, pero todas fueron jugadas inofensivas y ninguno estuvo fino de cara al arco rival.
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