La francesa presentó en Cannes la cinta ´Thérèse Desqueyroux´, donde interpreta a una joven que se casa para ´ordenar´ sus ideas, claramente más avanzadas que su tiempo.
La actriz francesa Audrey Tautou, conocida mundialmente por el papel de "Amélie" que interpretó en 2001, vuelve a las pantallas con una interpretación con la que pretende abandonar la "dulzura" de personajes como aquel.
Con "Thérèse Desqueyroux", el filme que hoy presentó en Cannes fuera de competición, la actriz pretende seguir la senda de papeles más densos, como el que interpretó en "Coco avant Chanel" en 2008, y alejarse de la imagen que la hizo famosa.
"No sabía si llegaría a borrar del todo, a dejar esa dulzura que a menudo he dado en los personajes que he interpretado en el pasado. Es lo que me daba más miedo", confesó en entrevista con Efe sobre el papel en la película del recientemente fallecido director francés Claude Miller.
"Pero preparé mucho este papel antes del rodaje, es decir, que no dejé nada al azar y sentía la necesidad de que todo su viaje interior durante toda su historia me quedara muy claro", explicó Tautou (Beaumont, Francia, 1976).
En "Thérèse Desqueyroux" encarna a una joven que se casa con un terrateniente de la zona de Las Landas (suroeste de Francia), propietario como su familia de extensos pinares, pero que acude al matrimonio para que este le ayude a "ordenar" sus ideas, claramente más avanzadas que su tiempo.
La protagonista tiene un rico mundo interior que no expresa, puesto que las convenciones de la época en la que le ha tocado vivir (los años veinte del pasado siglo) se lo prohíben.
"No dejé lugar ni a un gramo de duda, de incomprensión, y si tenía la menor duda se lo preguntaba a Claude", explicó sobre la manera en la que preparó el personaje y cómo lo trató con el realizador.
"Es verdad que tenía ganas de aproximarme lo más posible a su viaje interior y el resto vino sin que pudiera controlarlo", reconoció.
Anotó el guión con sus propios comentarios sobre lo que intuyó que sentía la protagonista: "ese trabajo, de hecho, no lo había hecho nunca pero creo que porque Thérèse está obligada a callarse, no tiene derecho de hablar de lo que siente, y ya lo dice ella: nosotros no hablamos de lo que sentimos".
No está segura de si se siente más cómoda en este tipo de interpretaciones, pero dice que es un personaje que le ha gustado "especialmente", le ha interesado mucho trabajar sobre esta mujer, "su sufrimiento, lo que oculta, sobre su complicidad", en definitiva que le "ha apasionado".
Sobre la experiencia de trabajar con alguien tan destacado en la historia del cine como Miller, aseguró que "fue verdaderamente única y maravillosa porque Claude era un ser absolutamente exquisito, con mucho amor por los actores, con elegancia y delicadeza".
Y además porque tenía "una inteligencia tal que hacía falta estar a su altura, a la altura del guión, que era realmente magnífico, a la altura de sus personajes que eran tan apasionantes".
Miller falleció el pasado 5 de abril y está considerado como uno de los grandes directores de la "nouvelle vague", fue director de producción de François Truffaut y asistente de Jean-Luc Godard.
"Creo que los grandes directores son los que tienen de verdad una mirada personal del mundo, que tienen una mirada diferente de la de los otros, que son indispensables, necesarios", explicó Tautou.
La actriz, imagen del perfume más conocido de la casa de moda Chanel, aseguró que, en su carrera como actriz, busca "novedades, desafíos", que es lo que le gusta.
Y para no decepcionar a quienes admiran su trabajo en papeles más ligeros, contó que ahora mismo está rodando otro papel en una comedia ("L"écume des jours", dirigida por Michel Gondry), quizás no cómica "pero sí un filme mucho más ligero, una película con un papel más dulce".
EFE
Comparte esta noticia