Muchos inquilinos tratan desconocer el contrato que han celebrado con el arrendador y quieran quedarse con la propiedad, pero ante esta situación existen alternativas de desalojo.
Luis Francisco Paz, abogado laboralista, sostuvo que es común que los malos inquilinos empiecen a desconocer el contrato que han celebrado con el arrendador y quieran quedarse con la propiedad dejando de pagar la renta, por ejemplo, los gastos comunes o demás concepto que correspondan al contrato.
Manifestó que muchos inquilinos se atrincheran en la propiedad, pero eso no les da el derecho del inmueble. No obstante, sacar a ese inquilino es difícil porque las reglas de juego que existen hacen que desalojar una persona de una propiedad sea complicado y por lo tanto se deben iniciar las sanciones judiciales necesarias.
El especialista anotó que existen 4 alternativas de desalojo:
Desalojo ordinario, cuando no se tiene contrato, no ha sido bien redactado o no tiene las formalidades necesarias. Es un proceso que en la Corte de Lima puede tomar hasta 3 o 4 años.
El desalojo por formulario, que nadie lo utiliza.
El desalojo exprés que es una cláusula que se incorpora en el contrato.
Y el desalojo notarial, que necesita de una escritura pública y es la mejor alternativa porque a pesar de que es más costoso permite ahorrar tiempo ya que un proceso de desalojo notarial puede concretarse en 6 meses a 1 año desde que se inicia el proceso.
El abogado Paz manifestó que lo que va a primar es lo que figura en el contrato que se ha negociado o pactado, pero si no se ha negociado nada o el pacto no es correcto, la ley por defecto indica 2 meses y 15 días como motivo jurídico para que el propietario pueda finiquitar el contrato y exigir el retiro del inquilino.
Video recomendado
Comparte esta noticia