LILA no pierde las esperanzas de encontrar una familia que valore la fidelidad y el cariño que les daría por siempre.
La historia de Lila es muy triste, llegó pequeñita al albergue de San Borja y luego de unos meses fue adoptada, sin embargo después de un tiempo la devolvieron sólo porque creció más de lo que deseaban.
Lo que tiene de grande lo tiene de amorosa, es la perrita más cariñosa que hemos conocido, es tan buena, tan noble, que no podemos entender como no consigue un buen hogar, sólo por su tamaño.
LILA no pierde las esperanzas de encontrar una familia que valore la fidelidad y el cariño que les daría por siempre.
Tiene un año, es marrón atigrada, ya está esterilizada y pueden verla en el albergue de la Municipalidad de San Borja llamando al 998179616 con la Dra. Erika Gogin o escribir al correo maritzasoto_4@hotmail.com.
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