Los lobitos marinos fueron rehabilitados por ORCA y pasaron tres semanas en cuidados intensivos mientras se recuperaban de sus afecciones.
El equipo de Rescate de ORCA encontró a Waldo, un lobo marino de ocho meses de edad, en Playa Redondo, Miraflores, casi al borde de la pista en la Costa Verde. Perdió a su referente materno y llegó sufriendo de gastritis, además de estar desnutrido y deshidratado.
Mío, otro lobo marino destetado de un año de edad, fue hallado abandonado y con neumonía en San Bartolo.
Los lobitos marinos fueron rehabilitados por ORCA en su Base Punta Negra donde pasaron tres semanas en cuidados intensivos mientras se recuperaban de sus afecciones y recobraban la salud poco a poco quedando en condiciones de volver al mar
Los lobitos llegaron a la isla gracias al cordial ofrecimiento de la empresa Lobos del Callao Tours. La embarcación utilizada fue el Catamarán turístico "Spondylus" de 17 metros de largo. Waldo y Mío ya están en casa.
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