El mandatario norteamericano empezó a celebrar su onomástico alternando eventos públicos y exclusivas cenas de recaudación de fondos para su campaña de reelección.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no tuvo mejor idea que recibir su cumpleaños 50 en la ciudad que le permitió ser senador. "Estoy reportando desde Chicago. Con una pequeña celebración en mi casa", dijo Obama antes de conversar en una videoconferencia con seguidores demócratas.
Posteriormente, el presidente se dirigió a un gran evento de recaudación de fondos y más tarde tenía previsto una cena con donantes, que han pagado 35.800 dólares por entrada.
En el acto celebrado en la sala Aragon de Chicago, estaba acompañado por el alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, quien fuera jefe de gabinete de Obama, y con el músico de jazz Herbie Hancock, que interpretó unas canciones al piano.
Entre la audiencia, se podía ver a varias personas que portaban gorras con el número 50, en referencia al cumpleaños del presidente estadounidense, que para la ocasión lucía un nuevo corte de pelo.
La ganadora de un premio Grammy, Jennifer Hudson, recibió a Obama cantando el "Cumpleaños Feliz", que fue coreado por todos los asistentes.
El viaje de Obama a Chicago es su primera salida de Washington en más de un mes, donde ha tenido que enfrentar la complicada crisis de la deuda en el Congreso que amenazó con sumir a EE.UU. en suspensión de pagos, situación conocida como “default”, algo que fue evitado en el último momento por pacto bipartidista.
EFE
Comparte esta noticia