Kagar, Bastardo y Salsipuedes son algunos de los nombres de ciudades europeas que llaman la atención de quienes hablamos en español.
Un informe recopila curiosos nombres de ciudades europeas, que más allá de su interés cultural y léxico, podría causar carcajadas por su extravagancia, recoge el portal ABC de España.
Bastardo: Esta localidad italiana, perteneciente a la comuna del Gianno dell’Umbría, en la provincia de Perugia, toma su nombre de una hostería, llamada “Ostería del Bastardo” que se estableció en el lugar hace unos tres siglos. Nada que ver, por tanto, con la filiación de sus más de 1.500 habitantes.
Kagar: Es un pequeño pueblo situado a unos 100 kilómetros de Berlín y perteneciente al municipio de Rheinsberg. Se encuentra muy cerca de la pedanía de Repente, por lo que a los españoles que viajan por allí, suele prestarle la broma de ir “de Repente a Kagar”. Además, uno de sus mayores atractivos es su lago, el Kagarsee, cuyo nombre se traduce como “lago de Kagar”, ya que en alemán la partícula “see” significa lago o estanque en alemán. Se trata, sin duda, de una bonita región teutona, aunque con escatológicas reminiscencias para los castellanohablantes.
Vagina: Por extraño que pueda parecer, el significado del topónimo de esta localidad rusa, ubicada en la Óblast de Tiumén en plenos montes Urales, es exactamente el mismo que en español, inglés y el resto de idiomas que han tomado esta palabra de origen latino para designar este órgano genital femenino.
Salsipuedes: El origen del nombre de esta población de 6.000 habitantes situada en la provincia argentina de Córdoba se basa una leyenda. Según esta historia, un aborigen de la tribu comechingón secuestró a la esposa de otro y tiró a su marido al río. Mientras este marido se ahogaba, el otro le dijo “sal si puedes”, bautizando al río y al pueblo.
Condom: Esta comuna del departamento francés de Gers y algo más de 7.200 habitantes ha sabido explotar su topónimo creando un museo del condón que abre sus puertas cada verano.
Fucking: Es un pequeño pueblo austríaco situado a apenas cuatro kilómetros de la frontera con Alemania y muy cercano a la localidad germana de Kissing. Su nombre proviene del apellido Focko. Como curiosidad, hay que señalar que el cartel de entrada al pueblo está fijado con hormigón para evitar sus frecuentes robos.
Guarromán: Cerramos esta peculiar clasificación con esta localidad de sello español. Su nombre procede de una deformación de “Guadarromán”, que a su vez deriva del árabe “Wadi-r-rumman” que significa “río de los granados. Con algo menos de 3.000 habitantes, este municipio de Jaén es, dicho sea de paso, la sede la Asociación Internacional de Pueblos con Nombres Feos, Raros y Peculiares.
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