Uno de los ejecutados purgaba condena por asesinato y robo, mientras que el otro recibió la pena capital por violar y matar a una anciana de 70 años, durante el robo de su casa en 1995.
Dos hombres fueron ejecutados la noche del jueves en Estados Unidos, un blanco en Texas (sur) y un negro en Alabama (sureste), ambos condenados por asesinato, indicaron el viernes las autoridades penitenciarias estatales.
Lee Taylor, de 32 años, presentado por la prensa local como miembro de una pandilla de la hermandad aria de Texas, fue declarado muerto a las 18H24 locales, diez minutos después del comienzo de la inyección letal.
Taylor cumplía cadena perpetua por asesinato durante un robo, cuando fue declarado culpable en 2000 de apuñalar a un compañero de prisión, negro, siendo entonces sentenciado a muerte.
Por otra parte, Eddie Powell, de 41 años, fue declarado muerto a las 18H30 en Alabama. Según la prensa local, renunció a una última comida y se compró un sándwich y papas fritas de una máquina expendedora antes de ser llevado a ejecución.
Powell había sido condenado a muerte por violar y matar a una mujer de 70 años de edad, durante el robo de su casa en 1995. Tanto Texas como Alabama llevaron a cabo estas ejecuciones con un cóctel de tres productos, entre ellos, el anestésico pentobarbital utilizado por los veterinarios para sacrificar animales.
Muchos estados incluyeron el pentobarbital en sus protocolos de ejecución en sustitución del tiopental, el anestésico que se suele usar en estos casos, no disponible en stock.
Taylor es el quinto condenado ejecutado en 2011 en Texas, y Powell, el cuarto en Alabama. Nueve ejecuciones están previstas en Texas de aquí a finales de 2011.
Estados Unidos ha ejecutado a 22 personas este año.
AFP
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