Estudiantes en Alemania murieron con "lapiceros en sus manos"

Vestido con uniforme militar negro, encapuchado y con una pistola automática, un joven de 17 años protagonizó este miércoles una de las peores masacres que se recuerden en Alemania al acribillar a 16 personas y luego quitarse la vida en una escuela de Winnenden, una pequeña ciudad a 20 kilómetros de Stuttgart.

Tim Kretschmer, abrió fuego contra "todo lo que se movía" y tomó por sorpresa a las víctimas en la escuela, la mayoría de las cuales eran mujeres, ocho alumnas, tres profesoras y un joven, detalló Heribert Rech, ministro del Interior para la región Baden Wuerttemberg.

"Fueron completamente tomados por sorpresa. Algunas de las víctimas aún tenían sus lapiceros en las manos", relató.

Kretschmer abrió fuego en las tres aulas del primer piso del centro educativo, incluyendo el salón de física donde la maestra fue encontrada muerta debajo de su pupitre.

Rech indicó que la policía arribó en unos cuantos minutos. "La velocidad de la intervención muestra que estaban prevenidos por el desencadenamiento de los eventos".

El muchacho era de una familia acomodada y usó un arma de sus padres, que tienen 18, según la policía. Tras el tiroteo el agresor huyó en dirección del centro de la ciudad en un vehículo del que echó al conductor.

 Las fuerzas del orden lo persiguieron con la ayuda de helicópteros. Las autoridades evacuaron la escuela y lanzaron una advertencia a los automovilistas que circulaban en el sector llamándolos por radio a no tomar autopistas.

Es algo "inconcebible" que enlutece "a toda Alemania", afirmó la canciller Angela Merkel en una
declaración televisada.

"Como todo el mundo en Alemania estoy horrorizada, trastornada y estupefacta por lo que ha ocurrido en el colegio Alberville, en Winninden" (sudoeste), afirmó Angela Merkel, quien ofreció todo el apoyo de su gobierno a
las autoridades locales.

"Es un día de luto para toda Alemania", añadió, añadiendo que su pensamiento y sus oraciones iban a la familia de las víctimas.