En medio de cuestionamientos sobre la legitimidad de las elecciones, Nicolás Maduro jurará ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no en el Congreso. Solo cinco países decidieron asistir a la investidura del líder chavista.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, asumirá este jueves un segundo período de seis años, considerado ilegítimo por gran parte de la comunidad internacional, con un país en ruina y cada vez más aislado.
Nicolás Maduro, de 56 años, jurará ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no en el Congreso, único poder no oficialista, en una ceremonia prevista para las 10:00 locales (14H00 GMT). Coincidiendo con la investidura, la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrará una sesión extraordinaria para abordar la situación de Venezuela.
La Unión Europea (UE), Estados Unidos y el Grupo de Lima -de 14 países-, desconocieron la reelección de Maduro en los comicios del pasado 20 de mayo, adelantados por la oficialista Asamblea Constituyente y boicoteados por la oposición, que los consideró un fraude.
La UE y el Grupo de Lima -excepto México- no enviarán representantes a la ceremonia, a la que acudirán los presidentes de Bolivia, Cuba, El Salvador y Nicaragua y delegados de otros países aliados como China, Rusia y Turquía.
Heredero político del líder socialista Hugo Chávez (1999-2013), el exchofer de bus y exsindicalista gobierna con mano fuerte tras haber sacado del juego a sus adversarios, con el control institucional y el apoyo de los militares, a quienes dio enorme poder económico.
"Agonía" o "prosperidad"
"Yo soy presidente", se lee en afiches que cuelgan en céntricas calles de Caracas, adonde el oficialismo movilizará este jueves a sus partidarios. No obstante, la desesperanza y resignación se palpan en muchos venezolanos, asfixiados por la peor crisis que haya sufrido en su historia moderna el país con las mayores reservas petroleras del mundo.
"Esto va a alargar más la agonía que hemos vivido en los últimos años. Todo ha decaído gravemente, los bienes y servicios básicos cada día son más inalcanzables. Nos sentimos atados de manos", dijo a AFP la enfermera Mabel Castillo, de 38 años.
Expertos auguran un agravamiento de la debacle socioeconómica. Además de la escasez de comida y medicinas, los venezolanos lidian con una una hiperinflación que según el FMI alcanzará 10,000.000% en 2019.
(Con información de AFP)
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