Un estudio global reveló que los productos alemanes son los más valorados por los consumidores internacionales.
El "Made in Germany" (hecho en Alemania) es el sello de mayor calidad que puede tener un producto a nivel global, según un estudio de Statista. La organización determina que los bienes del país europeo son los más valorados por los consumidores internacionales.
El análisis fue conducido entre diciembre de 2016 y enero de 2017 en un total de 64 países. Cada uno de las 43,034 personas participantes evaluó hasta a tres países distintos. Detrás de Alemania se ubicaron Suiza, la Unión Europea, que tiene identificación propia desde 2003, el Reino Unido, Suecia, Canadá e Italia.
Gana en todo. El concepto del "Made in" pertenece al Reino Unido, donde surgió a fines del siglo XIX para competir contra las imitaciones de productos que hacía Alemania.
Los resultados arrojan que Suiza obtuvo un alto puntaje en las categorías de "símbolo de estatus" y "autenticidad". De los productos italianos se aprecia el "diseño" y la "originalidad". Canadá sobresale en cuestión de "sostenibilidad" y "producción justa", en tanto las mercancías japonesas destacan en el ámbito de la "tecnología de punta". Los alemanes ganaron practicamente en todo, aunque sus mejores notas fueron en percepción de calidad y estándares de seguridad elevados.
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