Seis "narcos" son abatidos en segundo día de bloqueos en vías de México

Presuntos narcotraficantes bloquearon por segundo día consecutivo avenidas de Monterrey (norte de México) y se enfrentaron con el Ejército en dos tiroteos que dejaron seis muertos y tres heridos, informaron el viernes autoridades del estado de Nuevo León.

Hombres armados forzaron a varios autobuses, camiones y automóviles a formar barricadas en al menos 20 avenidas de Monterrey, la tercera ciudad de México, y otros municipios para evitar el avance del Ejército, dijo el procurador (fiscal) estatal, Alejandro Garza.

Nuevo León, al que pertenece Monterrey, y el estado de Tamaulipas (norte), ambos fronterizos con Estados Unidos, son territorios en disputa entre los cárteles del Golfo y Los Zetas, según las autoridades.

Los comandos armados obligaron a los vehículos a obstruir la circulación "y después se llevan las llaves o revientan los neumáticos, volviendo más complicado el retiro de los automóviles", dijo el viernes el secretario de Seguridad Pública estatal, Luis Carlos Treviño, en conferencia de prensa.

 Al mismo tiempo que se efectuaba el operativo para desbloquear las avenidas, se registró una balacera entre militares y presuntos integrantes de Los Zetas en el municipio de China con un saldo de "cuatro supuestos integrantes de Los Zetas muertos", dijo el secretario.

Más temprano, patrullas militares persiguieron durante varias horas a una camioneta, también con presuntos miembros de Los Zetas con los que se enfrentaron en una balacera que se prolongó en un campus del Tecnológico de Monterrey, una de las universidades privadas más importantes de América Latina.

Dos de los presuntos sicarios murieron en la universidad y tres militares resultaron heridos, explicó Garza.

También en Monterrey, el Ejército encontró el jueves más de 200.000 cartuchos y 22 granadas escondido en una granja porcina.

El gobierno mexicano ha desplegado a casi 50.000 militares contra los cárteles, a los que responsabiliza de más de 15.000 homicidios en los últimos tres años.
AFP