Fotos y Video | Villa Zavaleta, la barriada más pobre de Buenos Aires agudiza su situación por la crisis

Villa Zavaleta, una barriada pobre de Buenos Aires en Argentina, se veía azotada por la droga, sus mil 200 familias ya se las veían negras antes, pero con la crisis económica presentada en los últimos meses empeora las cosas.

La pobreza golpea a 90% de los habitantes de este sector, emplazada en el sur de la capital. Solo 10% tiene un empleo formal, muchas veces en cooperativas de recolección de basura, una ocupación que hace soñar a más de uno, tal es la dificultad de conseguir trabajo, explica Alejandra Díaz, responsable en Villa Zabaleta de La Poderosa.

"Mucha gente perdió su trabajo, acá se vive con casi nada, de la solidaridad, de changas (empleo eventual)", dice Diaz, una organización política no partidista muy presente en zonas desfavorecidas.

Situación económica de las familias

Villa Zavaleta, barrio fundado en 1968, y que nació como un lugar de vivienda temporaria, es apenas una de las cuatro mil 100 barriadas pobres de Argentina, en las que viven un millón 340 mil personas, según un relevamiento del gobierno y las ONG.

Esta zona no cuenta con agua corriente ni sistema de cloacas eficiente, los habitantes sufren inundaciones cada vez que llueve, por lo que en cada techo han colocado un tanque, esta es la única forma de contar con agua todos los días.

Relatos 

Uno de los residentes de esta villa, Fidel Ruiz de 23 años, afirma que "vivir en una 'villa' es muy duro, es violento, tenés que soportar la violencia económica, la violencia policial, la violencia política. Nos autogestionamos porque el Estado está ausente", declaró.

Esto es reforzado por Amelia Corbalán, quien atiende un almacén en su casa. "Ya no vendo gran cosa. Solo productos de primera necesidad. La gente no tiene un peso"; narra. Esta mujer de 42 años incluso recogió a dos vecinos adolescentes abandonados por sus familias, para que no caigan en la droga y la delincuencia.

"Seguimos luchando por una vida mejor, pero estamos lejos, no sé si podemos esperar un futuro mejor, pero lo esperamos", dice Roxana Benega, madre de Kevin Benega, un niño de nueve años que murió luego que una bala perdida, tras una disputa entre narcotraficantes de la zona, lo matara en septiembre del 2013. (AFP)