Cuatro personas siguen desaparecidas en la zona afectada, y el número de detenidos por su presunta responsabilidad asciende a 42.
Las autoridades chinas elevaron hoy a 73 la cifra de muertos por un alud de escombros de obras que el pasado 20 de diciembre enterró un parque industrial de Shenzhen (sur del país), cuatro más que en el anterior recuento de hace dos semanas.
Según informó la agencia oficial Xinhua, cuatro personas siguen desaparecidas en la zona afectada, y el número de detenidos por su presunta responsabilidad asciende a 42 (once más que en las últimas informaciones de mediados de enero).
Seis de los 17 heridos continúan hospitalizados, mientras equipos sanitarios han descartado la posibilidad de epidemias en la zona del accidente, uno de los peores ocurridos en el sector industrial chino en el año 2015.
Un total de 4.630 empleados del parque industrial afectado tuvieron que ser realojados, y también hubo daños en campos de cultivo cercanos, por lo que los agricultores locales fueron compensados, señaló hoy la información oficial.
La tragedia se atribuyó inicialmente a causas naturales pero finalmente se dictaminó que se había debido a la negligencia de las autoridades de seguridad laboral y la firma que gestionaba los escombros junto al parque industrial, ya que el lugar había superado su capacidad de almacenamiento hacía meses.
El accidente reveló irregularidades en el manejo de desechos de obras en Shenzhen, ciudad vecina a Hong Kong que ha sufrido un acelerado crecimiento en los últimos años como resultado del rápido desarrollo del mercado inmobiliario y su conversión en la "capital de la tecnología" de China.
EFE
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