La marcha fue convocada por el movimiento social "Espacio, Democracia y Convivencia" para exigir la liberación de presos políticos implicados en el proceso independentista ilegal catalán, declarado inconstitucional.
Más de 300 mil personas salieron a las calles de la ciudad de Barcelona en España para pedir la libertad de los presos políticos encarcelados por el proceso independentista iniciado en Cataluña en 2017.
La marcha fue convocada por el movimiento social "Espacio, Democracia y Convivencia", bajo el lema "Por los derechos y las libertades, por la democracia y la cohesión, os queremos en casa". Los manifestantes se movilizaron desde la plaza España hasta el parque de les Tres Xemeneis, exigiendo espacios de diálogo y una negociación política para resolver la crisis catalana.
A la convocatoria se unieron partidos independentistas y la coalición de izquierdas Catalunya en Comú-Podem. También estaba entre los asistentes, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. “Éste es un momento de regresión democrática peligroso para todo el mundo" en Cataluña y toda España, dijo Colau a la prensa.
Durante el recorrido los participantes portaban numerosas banderas independentistas y camisetas amarillas, color que usan los secesionistas como símbolo de solidaridad con los encarcelados. En su marcha gritaban frases como "No estáis solos", "Somos gente de paz" o "Libertad, presos políticos" a favor del diputado catalán Puigdemont.
Al finalizar la protesta, leyeron un manifiesto, así como las cartas de dos de los procesados por rebelión, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, escritas desde la prisión.
Presos políticos
El pasado 23 de marzo, el juez español Pablo Llarena procesó a 25 personas por supuesta implicación en el proceso independentista ilegal catalán, declarado inconstitucional por varios delitos, 13 de ellas por rebelión.
Ordenó el encarcelamiento preventivo de los procesados que aún estaban en libertad y pidió la detención y entrega a España de los huyeron al extranjero, como el expresidente regional catalán Carles Puigdemont, quien luego fue detenido en Alemania y puesto en libertad provisional por jueces de ese país.
Nueve de los acusados de rebelión cumplen prisión provisional en España y cuatro permanecen fugados en varios países europeos (Alemania, Bélgica, Reino Unido y Suiza).
La protesta coincide con los seis meses de encarcelamiento de los líderes sociales secesionistas Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, dos de los procesados por rebelión y otros delitos.
Sánchez fue dos veces candidato a presidente de la comunidad autónoma de Cataluña tras las elecciones regionales del 21 de diciembre de 2017, pero el juez Llarena le denegó el permiso de libertad para presentarse a la elección por riesgo de "reiteración delictiva".
EFE
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