Poco después de hacerse pública la decisión de la corte ecuatoriana, decenas de venezolanos sin pasaporte salieron corriendo hacia la fila para recibir la carta andina de Colombia, el documento exigido hasta ahora.
La emoción era visible este viernes entre los emigrantes venezolanos tras conocerse la decisión de un tribunal de Quito de anular el requisito de pasaporte a los emigrantes por considerarlo una violación de los derechos humanos. La agencia Efe constató que, poco después de hacerse pública la decisión, decenas de venezolanos sin ese documento salieron corriendo hacia la fila para recibir la carta andina de Colombia, el documento exigido hasta ahora.
"Una emoción grande, de verdad que no nos esperábamos eso. Es una ayuda muy humanitaria. Venezuela está que no se puede. Salimos con la intención de ayudar a nuestra familia, a los niños que se mueren porque no hay medicinas", dijo Nazareth Márquez, de Caracas, en la terminal fronteriza.
Lagrimas de emoción
La decisión de la Corte ha causado gran alegría entre los que hoy se encontraban en el paso fronterizo, donde las autoridades de emigración ecuatorianas bloqueaban el ingreso a menos que presentaran el pasaporte. Apenas una ventana de doce horas en la noche del jueves a hoy, viernes, permitió la pasada madrugada el ingreso sin ese documento, con motivo del "corredor humanitario" abierto por Ecuador entre el norte y el sur, del que se han aprovechado un millar de personas.
Entre otros emigrantes se distinguían lágrimas en los ojos y una gran emoción, mientras muchos, sin creérselo aun, trataban de llamar a sus familiares para avisarles de que ya los dejarían pasar.
Varado en la carretera
Un tribunal de Quito anuló la regulación del Gobierno por considerar que violaba el derecho de las personas a la movilidad, y reinstauró la cédula como único documento necesario para cruzar fronteras. Asimismo, dio un plazo de 45 días al Ministerio de Relaciones Exteriores para que presente un plan de contingencia humanitario frente a los problemas de la emigración.
Josué Viteri, de 18 años, será uno de los beneficiarios de la medida, que debía aún llegar a oídos de las autoridades de emigración ecuatorianas para su aplicación. Viteri, natural de Mérida, se encontraba varado este viernes por la ausencia de pasaporte.
Comparte esta noticia