La cantante Flor Sheiza Quispe, 'Muñequita Milly', falleció luego de una cirugía estética por una presunta negligencia médica. La industria de la belleza en el país aumenta; sin embargo, la fiscalización y supervisión de las autoridades de salud no es suficiente.
Actualidad
Más de 70 clínicas o establecimientos de cirugías estéticas están clausurados temporal o definitivamente, según Susalud.
El fallecimiento de Flor Sheiza Quispe, cantante folclórica conocida como 'Muñequita Milly', luego de someterse a una cirugía estética, ha encendido las alertas sobre la falta de fiscalización que existe en la industria de la belleza en el Perú. Los familiares de la artista han denunciado al doctor Víctor Barriga Fong por presunta negligencia médica y la clínica donde se operó fue clasurada por la Municipalidad de La Victoria.
"[Flor] queda mal desde el primer día de la operación. Llega con dolores insoportables, que los enfermeros solamente inyectaban y el doctor no hacía nada. Queremos justicia, esto no puede quedar así, no queremos que otras jovencitas pasen por lo mismo", declaró a RPP, Wilfredo Quispe, esposo de la cantante.
No son casos aislados
El caso de la "Muñequita Milly" no es el único. En el 2023 la también cantante Yuliana Perea, de 38 años, murió luego de someterse a una liposucción en la clínica Santa Anita en Iquitos, Loreto. Su madre, Purita Torres de Perea, también denunció negligencia médica por parte del doctor John Casado.
"El fallecimiento de Yuliana fue porque se le perforó el vaso sanguíneo y hubo negligencia médica. No la auxiliaron en el momento debido, la ambulancia no tenía luz y se veía que la enfocaban con un foco del celular. El médico sigue trabajando, tranquilo, se da la gran vida y mis nietos necesitan apoyo", señaló a RPP.
El establecimiento donde se realizó la operación funcionaba, pese a estar clausurado, detalló Torres de Perea. Han pasado ocho meses desde la muerte de su hija y actualmente está a la espera de la exhumación del cuerpo para dar con las causas exactas del fallecimiento.
En el 2019 una mujer, identificada como Marlene Rivera Malque, de 37 años, murió tras realizarse a una liposucción en la clínica estética Kosmo Medic, en Surco. En el 2020 ocurrió lo mismo con una mujer de 54 años en el centro de Cirugía Estética Láser & Spa Las Condes, en San Borja. En Huancayo, ese mismo año, también falleció una mujer de 54 años, luego de una operación estética en la clínica Espinoza. La policía investigó el caso por presunta negligencia médica.
Sin sanción oficial, un cirujano denunciado puede seguir operando
En el Perú existen 174 cirujanos plásticos, estéticos y reconstructivos registrados ante el Colegio Médico del Perú (CMP). De esta cantidad, 36 figuran como inhabilitados, lo que significa que han cometido alguna falta ética o que no han cumplido con pagar la mensualidad de la colegiatura. En cualquiera de los dos casos están prohibidos de ejercer. Según esta institución, si sumamos todas las especialidades, existen 111 médicos suspendidos.
Pese a las denuncias por negligencia médica en su contra, tanto el Dr. Barriga Fong como el Dr. Casado siguen figurando como hábiles para ejercer y realizar operaciones estéticas, según pudo constatar RPP Data en el registro del CMP. Mientras no se sancione oficialmente a un médico, este no puede ser inhabilitado, debido al principio de presunción de inocencia, explicó el doctor Pedro Riega, decano del Colegio Médico del Perú.
"El plaxo máximo para el procedimiento ético disciplinario es de dos años; sin embargo, eso no quiere decir que los procesos deban demorar tanto. Cuando las evidencias son claras, esto debe ser mucho más rápido. Tenemos mucha preocupación por aquellos casos en los que existen daños irreparables como una discapacidad o la muerte", indicó.
Riera, quien asumió el decanato a inicios de abril de este año, aseguró que su gestión "busca garantizar que el Colegio Médico pueda actuar de oficio de forma inmediata ante este tipo de casos, de tal manera que los resultados sean en beneficio de la verdad, tanto de los pacientes como de los médicos".
Te recomendamos
¿Dónde queda la fiscalización?
En el Perú, la entidad encargada de fiscalizar, supervisar y sancionar a los establecimientos de salud que realicen cirugías estéticas sin cumplir con los requisitos necesarios es la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud). A la fecha existen 413 clínicas o consultorios de cirugía plástica y estética en todo el país, según el Registro Nacional de Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (Renipress), adscrito a SuSalud. De esta cantidad, 76 han sido clausurados de forma temporal o definitiva.
¿Cómo fiscalizan que estos consultorios no atiendan? ¿Cuántas denuncias han recibido por mala praxis? ¿Cuántas multas han impuesto en el último año? RPP Data intentó, por todos los medios, conversar con un representante de SuSalud para responder a estas preguntas; sin embargo, hasta la publicación de este informe, no obtuvimos respuesta.
Para que una operación se realice en un lugar seguro, se debe garantizar que este tenga todos los espacios habilitados por si ocurre alguna complicación, indicó el médico cirujano Walter Navarro.
"La clínica debe tener una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), un coche de paro, una máquina de anestesia. Además, la evaluación previa del paciente es importantísima, saber si toma medicinas o es diabético. No hay ninguna cirugía ni procedimiento que esté libre de riesgo”, dijo.
Aseguró también que es necesario que entidades como SuSalud fiscalicen el "intrusismo", pues muchas personas que no son médicos están realizando este tipo de procedimientos. "Muchos cosmiatras [técnicos de enfermería] y odontólogos hacen estas operaciones. Los que trabajamos en hospitales y clínicas vemos cómo llegan pacientes con complicaciones de liposucciones realizadas por cosmiatras y luego se desaparecen. Susalud, que es parte del Ministerio de Salud, es quien tiene que controlar todos los consultorios", mencionó.
Mientras el negocio de las cirugías estéticas aumenta en el país, la demora en las investigaciones por negligencia médica y el silencio de los entes fiscalizadores le siguen costando la vida a peruanas que merecen una atención médica segura.
Te recomendamos
Comparte esta noticia