El dirigente Edward Quiroga explicó la razón de su protesta contra la empresa minera Las Bambas y dijo que el Estado ha empezado una "persecución judicial" contra sus representantes. Aseguró que no negociarán mientras su dirigente Gregorio Rojas y sus asesores legales estén detenidos.
Vecinos del distrito de Chalhuahuacho en Apurímac anunciaron este lunes una nueva medida de fuerza en protesta por el proyecto minero Las Bambas y por la liberación de sus directivos y asesores, quienes fueron detenidos por presunta extorsión.
En declaraciones a RPP, el dirigente Edward Quiroga aseguró que pese a la reunión que del Ejecutivo con el gobernador regional, ellos no aceptarán ningún diálogo hasta que no se libere su compañero Gregorio Rojas y a sus asesores legales, quienes fueron detenidos el jueves pasado por presuntamente formar parte de una organización criminal dedicada a la extorsión.
“De acá no nos movemos hasta que haya solución. Hubo un diálogo entre el gobernador regional y la comisión que vino de lima, pero acá la comunidad no va a aceptar ninguna negociación mientras no liberen al dirigente Gregorio Rojas a sus asesores legales, porque nosotros creemos que les han sembrado”.
Demandas
Según explicó, el nuevo conflicto responde a una falta de la empresa minera MMG Las Bambas, a quienes acusan de haber invadido un sector del fundo Yavi Yavi para construir una trocha y así trasladar sus minerales.
“Los hermanos de Fuerabamba demandan por un derecho que es servidumbre de paso y le piden al Estado que expropie ese terreno que ellos han ocupado para aperturar la trocha y por donde pasan los camiones, pero en vez que expropie, porque no tenía licencia social”.
Enfrentamientos
Aseguró también que el Estado no escucha sus demandas y que por el contrario ha iniciado una “persecución jurídica” contra sus representantes. Denunciaron también que se usa la represión para romper sus medidas de fuerza y que solo se busca enfrentarlos a la Policía.
“Lo que el Estado hace ahora es una persecución jurídica a sus dirigentes y los han sembrado a sus abogados y los hacen ver como si fuera una pandilla. Yo me atrevo a decir que la única pandilla que hay es la empresa minera MMG Las Bambas y sus socios a través de la Confiep. Nos están enfrentando con nuestros hermanos que son nuestra misma clase social, nuestra misma etnia, nuestra misma lengua, hijos de obreros y campesinos que son los policías”.
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