La popular aplicación para gestionar salas de conversación en audio llega oficialmente a Android, y en NIUSGEEK te enseñamos cómo usarla y qué ventajas o desventajas ofrece frente a otras herramientas.
Tarde, pero presente. La aplicación de salas de audio Clubhouse ha iniciado su despliegue en Android y ya puede ser usada por millones de personas fuera del ecosistema iOS. Este formato de apps para conversaciones se ha vuelto popular entre otras aplicaciones, al punto de que Telegram y Twitter, entre otras, han logrado construir soluciones eficientes y que superan, desde otro ángulo, la visión original. Si aun prefieres mantenerte con la app original que dio inicio a este boom en 2021, esto es lo que debes saber:
Solo funciona mediante invitación. Por el momento, los usuarios deben recibir una invitación para acceder al sistema – por eso es una “casa club” -, pero hoy es más fácil conseguir una. Esto le da cierto control a la plataforma y permite verificar un historial de recomendaciones.
Reserva tu nickname. Si aun no consigues invitación, no importa. Entra con tu número de smartphone y podrás registrar tu nombre de usuario. Lo que hace el sistema es avisarte si uno de tus amigos ha ingresado a Clubhouse y si cuenta con invitaciones, para que te “pase la voz”.
Requieres asociar un número de teléfono a la cuenta desde el inicio. Al recibir una invitación de un contacto en la plataforma, el sistema valida la invitación en base a ese número. Con esto se garantiza que no se generen múltiples cuentas desde un mismo dispositivo. Una vez que se valida, ya estás dentro.
La configuración. Verás una serie de opciones tras darte de alta cargar una foto de perfil, escoger contactos para notificar que ya tienes cuenta, seguir a los que ya están en la plataforma y elegir tópicos en base a tus preferencias. Revisa cada tema que encuentres interesante y añade esos puntos a tu cuenta para una configuración personalizada.
La interfaz. Vamos a encontrar una serie de tarjetas que nos muestran la actividad en Clubhouse, basada en nuestras preferencias. En la parte superior, nos encontraremos una fila de cinco íconos: búsqueda, invitaciones – desde ahí podemos invitar usuarios -, calendario con las próximas salas por abrir, actividad de tus contactos y el acceso a tu perfil para añadir una bio. En esa última opción podemos ajustar las notificaciones y resolver dudas sobre el uso de la app y las guías de la comunidad. Ya en la parte de abajo, podemos empezar nuestra sala.
Empezar nuestra sala. Dale clic al botón verde de abajo y aparecerán una serie de opciones para iniciar nuestra propia sala. Podemos iniciar una sala abierta sin tópico, una solo con los seguidores y una cerrada que requerirá invitación. En la parte superior podemos añadir el título y las condiciones de conversación. Desde ahí, podemos ajustar la herramienta “levantar la mano” y permitirla en todo momento o con restricciones. Desde ahí podemos compartir con nuestros contactos la sala habilitada.
Programar nuestra sala. En la sección de calendario, podemos programar nuestro propio cuarto para que se active a una hora determinada y añadir, desde antes, a los ponentes o participantes. Es una buena manera de establecer regularidad con la audiencia.
Participar de una conversación. Solo debes darle clic a una sala y podrás acceder a la conversación. Por defecto, tu micrófono estará apagado y solo se activará si los moderadores – de pin verde – permiten tu participación. En la parte superior verás a los moderadores y a los invitados del panel, mientras que abajo verás a los asistentes y oyentes de la conversación. La conversación es por turno, así que atento. Para participar solo debes levantar la mano en la app y esperar el pase. Para abandonar la conversación, debes darle clic a “salir en silencio”.
¿Qué le falta? Un grabador de conversaciones. Clubhouse no lo añade, así que deberás considerar la grabación por métodos externos, como un cable a una consola o a una grabadora de mano con salida de audífonos. Tampoco podemos ver la conversación en una web, pues solo funciona mediante la aplicación. En ese punto, Telegram resulta más cómoda para creadores de contenido, pues tiene link de convocatoria y permite una participación fluida.
¿Para qué la deberías usar? Si tienes una marca, podrías usarla como proceso de engagement para responder dudas de tu comunidad y darles una voz propia, reforzando soluciones y permitiendo que ellos puedan dar sugerencias. Si tienes un podcast, es una buena manera de permitir el ingreso de oyentes a segmentos del programa. Si quieres usarla para pasar el rato, es fantástica.
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