El origen de los caminantes blanco es revelado. Brad Stark tiene una visión que cambiará la historia de Poniente. Y Hodor es la clave.
Toda esta nota es un SPOILER de parte del capítulo 5 de la sexta temporada de Game of Thrones (Juego de Tronos). Bran Stark hizo una apuesta y perdió, y puso en juego en futuro de Poniente. Si te pica la curiosidad, sigue leyendo. De lo contrario, sal de esta cueva y vuelve por donde viniste.
Aquí vamos....
Bran Stark descubre en una de sus visiones del pasado, junto al Cuervo de Tres Ojo, que los Niños de la Noche crearon a los caminantes blancos. Temerosos de lo que hacían los primeros hombres en Poniente, cortando sus áboles y amenazando sus vidas, crearon a estos monstruos para protegerse. Aterrado por esta visión y por conocer más, Bran se aventura de vuelta a las visiones, pero esta vez solo, sin guía. Resulta un grave error.
Descubre un enorme ejército de caminantes de pie, inmóviles, como estatuas. Al atravesar la columna, se encuentra con el Rey de la Noche. Misteriosamente, este nota la presencia del joven Stark y logra tocarle el brazo. Aunque Bran despierta de la visión, el Cuervo de Tres Ojos le advierte que ya es muy tarde. El Rey de la Noche conoce su ubicación y va tras de él. El único camino es huir, pero hay una advertencia final a Bran: es hora de que tome su lugar como Cuervo de Tres Ojos, aunque aún no esté preparado para ello.
Sin embargo, hay un último viaje hay antes de su partida. Bran realiza un viaje al pasado de Invernalia junto al Cuervo, justo en el momento en que los caminantes entran a la cueva en el presente. Meera Reed intenta despertarlo sin éxito y le suplica que le diga a Hodor que lo saque de ahí. Bran sigue en su viaje mental, pero escucha a Meera y consigue controlar a Hodor para que lo cargue, sin tener que abandonar su visión.
En la huida llegan hasta la puerta trasera, con Bran aún en trance. Los caminantes están cerca, Hodor abre la puerta y permite la huida, pero Meera le dice que la mantenga cerrada, que la sostenga mientras ella huye con Bran. En inglés, la expresión es "Hold the Door". Ese grito llega a través de Bran hasta el pasado, hasta la mente del pequeño Walden, que se desploma en medio de la Invernalia del pasado. En pleno ataque repite una y otra vez "hold de door", hasta que el grito se convierte en un monótono "Hodor".
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