Las manchas, los surcos, la forma, el color y textura de las uñas nos pueden dar información sobre el estado de nuestra salud.
Las uñas, principalmente de las manos, son parte de la primera carta de presentación ante los demás; a muchos les agradaría tenerlas fuertes, saludables y brillantes. Sin embargo, la realidad a veces suele ser diferente.
A menudo, tener las uñas quebradizas, manchadas o con surcos, se debe a problemas estéticos, no obstante, darles un vistazo más detallado, pueden revelar algunos datos sobre como anda nuestra salud.
Descubre a continuación lo que el aspecto de tus uñas está indicando:
Hoyuelos: Si son pequeños o por descamación es algo normal e inofensivo y puede ser solucionado por una manicurista; pero si se presentan del tamaño de la cabeza de un alfiler y son profundos, son una posible señal de psoriasis.
Surcos: Cuando son finos y longitudinales (verticales) suelen aparecer al final de la edad madura y no son motivo de alarma. Los surcos transversales (horizontales), suelen formarse después de una lesión o enfermedad de causa fiebre.
Resecas y quebradizas: En la mayoría de casos es un problema meramente estético, causado por el contacto frecuente con el agua y sustancias abrasivas, como limpiadores y detergentes.
También es posible que la causa sea un trastorno de la glándula tiroides o por la deficiencia de hierro y zinc.
Curvadas: Las uñas con una curvatura convexa normalmente se presentan junto con un engrosamiento de las yemas de los dedos, insuficiencia que los médicos llaman acropaquia y que es generado comúnmente por la insuficiencia de oxigeno en las extremidades.
El término uñas de cuchara se refiere a una condición en que la parte media de la uña se hunde y la punta se curva hacia arriba. Dos causas frecuentes de esta deformidad son el uso de jabones desengrasantes y el contacto con materiales como el cemento.
Manchas: La aparición de manchas se debe principalmente al contacto con productos químicos, como los esmaltes de colores intensos; así como también de los golpes.
Si la zona manchada es blanquecina o amarillenta y parece estarse extendiendo, podría tratarse de una infección por hongos. Si se trata de una mancha o franja pardusca podría ser señal de melanoma.
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