Loncheras deben tener en cuenta edad, peso, talla, actividad física y gustos del menor.
El preparar diariamente la lonchera escolar para los pequeños de la casa, supone ÂÂ en muchos casos- un dolor de cabeza para las madres de familia. Por ese motivo, el Ministerio de Salud (Minsa) presentó diversas propuestas para hacer más fácil esta tarea, y al mismo tiempo brindó las pautas que asegurarán que éstas sean saludables, ricas y nutritivas.
La licenciada Rosa Salvatierra del Instituto Nacional de Salud (INS) del Minsa, señaló que algunas madres por cuestiones de desconocimiento, practicidad y rapidez evitan hacer un balance nutricional adecuado en los alimentos que envían a sus hijos al colegio, optando por comida no saludable como dulce, hamburguesa o gaseosa.
Frente a esta situación, advirtió que las loncheras escolares "chatarra" basadas en papitas, queques, caramelos, barras de chocolate, entre otros, incrementan el sobrepeso y obesidad en los niños, que posteriormente los conduce a contraer enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes, colesterol, hipertensión, entre otras. Además de crear malos hábitos de alimentación que en el futuro se traducirá en tener una población adulta con esas características.
La especialista indicó que para la elaboración de las loncheras se debe tener en cuenta la edad del menor, el peso y la talla, a lo que se suma la actividad física que realiza y los alimentos que prefiere. Asimismo, pidió tener muy en claro que las loncheras no reemplazan a las comidas habituales como el desayuno, almuerzo o cena. Sin embargo, remarcó que son parte importante de la alimentación durante la etapa escolar.
En ese sentido, dijo que las loncheras saludables deben ser nutritivas y ligeras, siendo lo más indicado para la alimentación de los niños los lácteos, entre ellos, la leche, queso o yogurt; además de huevos, carnes y pescado; frutas frescas al natural o en jugos; verduras como lechuga, tomate, zanahoria, entre otros. En cuanto a los cereales, es recomendable el consumo de maíz, arroz, trigos tostados o inflados, pan, galletas o sándwiches nutritivos.
Enfatizó que estas provisiones de alimentos ayudan a los niños a crecer y desarrollarse normalmente, además que aportan energía necesaria para estudiar jugar y proteger su organismo. También mencionó que es recomendable enviar la fruta entera y con cáscara pues de esa manera se proporcionan vitaminas y minerales que el menor necesita. Igualmente debe incluir cantidades adecuadas de líquidos pero no bebidas gaseosas o jugos envasados.
La licenciada Rosa Salvatierra del Instituto Nacional de Salud (INS) del Minsa, señaló que algunas madres por cuestiones de desconocimiento, practicidad y rapidez evitan hacer un balance nutricional adecuado en los alimentos que envían a sus hijos al colegio, optando por comida no saludable como dulce, hamburguesa o gaseosa.
Frente a esta situación, advirtió que las loncheras escolares "chatarra" basadas en papitas, queques, caramelos, barras de chocolate, entre otros, incrementan el sobrepeso y obesidad en los niños, que posteriormente los conduce a contraer enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes, colesterol, hipertensión, entre otras. Además de crear malos hábitos de alimentación que en el futuro se traducirá en tener una población adulta con esas características.
La especialista indicó que para la elaboración de las loncheras se debe tener en cuenta la edad del menor, el peso y la talla, a lo que se suma la actividad física que realiza y los alimentos que prefiere. Asimismo, pidió tener muy en claro que las loncheras no reemplazan a las comidas habituales como el desayuno, almuerzo o cena. Sin embargo, remarcó que son parte importante de la alimentación durante la etapa escolar.
En ese sentido, dijo que las loncheras saludables deben ser nutritivas y ligeras, siendo lo más indicado para la alimentación de los niños los lácteos, entre ellos, la leche, queso o yogurt; además de huevos, carnes y pescado; frutas frescas al natural o en jugos; verduras como lechuga, tomate, zanahoria, entre otros. En cuanto a los cereales, es recomendable el consumo de maíz, arroz, trigos tostados o inflados, pan, galletas o sándwiches nutritivos.
Enfatizó que estas provisiones de alimentos ayudan a los niños a crecer y desarrollarse normalmente, además que aportan energía necesaria para estudiar jugar y proteger su organismo. También mencionó que es recomendable enviar la fruta entera y con cáscara pues de esa manera se proporcionan vitaminas y minerales que el menor necesita. Igualmente debe incluir cantidades adecuadas de líquidos pero no bebidas gaseosas o jugos envasados.
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