Por: Dr. Diego Maldonado, Neumólogo de la Clínica Cleveland. El cáncer de pulmón es el más común a nivel mundial y el que más causa de muerte produce.
Por Dr. Diego Maldonado, Neumólogo de la Clínica Cleveland.
El cáncer de pulmón es el más común a nivel mundial y el que más causa de muerte produce. En el 2019, aproximadamente 2.1 millones de nuevos casos fueron detectados, esto equivale a un 11.6% de la incidencia total de cáncer mundial. De acuerdo a un estudio realizado en el 2020 acerca de la incidencia global de la enfermedad, el cuidado de salud y los costos atribuidos al cáncer de pulmón fueron muy sustanciales a nivel mundial. La sobrevida de cinco años del cáncer de pulmón es solo del 17.8%, mucho menor que la de otros cánceres comunes. Como resultado de este alto índice de mortalidad (83%), el cáncer de pulmón sigue siendo un problema muy grave de salud pública a nivel mundial.
El cáncer de pulmón termina con la vida de más gente en Latinoamérica que cualquier otro tipo de cáncer. Perú no es la excepción. De acuerdo con la Agencia de Investigación Internacional de Cáncer, en el 2012, más de 60.000 personas murieron con cáncer de pulmón en la región de Latinoamérica. Esto representa más de 10.000 vidas perdidas que cualquier otro tipo de cáncer letal y aproximadamente 12 % de todas las muertes por cáncer. Esta enfermedad maligna no solo tiene una alta prevalencia en la región, pero además es la mayor causa de muerte por cáncer en Latinoamérica. En Perú y en otros países en desarrollo, los índices de incidencia todavía están en crecimiento
En Latinoamérica y en Perú la falta de recursos adecuados para la lucha contra el cáncer de pulmón crea más disparidad en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con esta enfermedad. Es interesante que en la mayoría de países latinoamericanos, la mortalidad del cáncer de pulmón ha disminuido en los hombres, pero no en las mujeres. Esto está en proporción directa a los patrones del hábito de fumadores en los países como Perú, Chile, Bolivia y Brasil, con predominancia de las mujeres. A pesar del hecho de que esta situación es muy conocida por las agencias de gobierno de los países latinoamericanos, los esfuerzos actuales de los médicos y los pacientes de la región todavía está por detrás de las necesidades que este problema representa en proporciones epidémicas.
La promoción para dejar de fumar es esencial ya que el tabaco es responsable del 85% al 90 % de todos los cánceres de pulmón. El control del tabaco y educación para dejar de fumar son las intervenciones más importantes para la prevención del cáncer de pulmón. Lamentablemente a pesar de una implementación óptima de estas estrategias, el número de casos de cáncer de pulmón siguen en aumento. La mayoría de cánceres de pulmón se le atribuye al uso del tabaco, inclusive en los pacientes no fumadores con cáncer de pulmón, un buen porcentaje se atribuye a la contaminación ambiental y al humo del cigarrillo. Desafortunadamente a pesar de que el índice de tabaquismo ha disminuido, esto no se refleja en una disminución en los índices de cáncer de pulmón en Latinoamérica y el mundo. Existen nuevas recomendaciones para la detección temprana y screening del cáncer de pulmón, esto es como una tomografía de pecho de baja radiación. La intención es de detectar cáncer de pulmón en estadio temprano (estadio I) para proveer la cura. Este tipo de práctica en Estados Unidos se ha convertido en cuidado de prevención estándar.
El estudio se realizó en más de 50.000 individuos, y determinó que, en las personas entre 55 y 74 años de edad con historia de por lo menos 30 años de fumar activo de un paquete de cigarrillos al día, o que dejaron de fumar dentro de los últimos 15 años, están a riesgo de cáncer de pulmón y, por ende, se benefician de un estudio de screening anualmente. En el estudio se comparó la tomografía de pecho de baja radiación con la radiografía estándar de pecho. Se determinó que existe una reducción del 20% de la mortalidad relativa y de una reducción absoluta de 62 muertes de cáncer de pulmón por cada 100.000 personas por año. Además, se determinó una reducción relativa del 6.7% de toda causa de mortalidad en el grupo de estudio, equivalente a una reducción absoluta de 74 muertes por cada 100.000 personas.
Aparte del control del tabaco, en Latinoamérica se deben hacer estudios de la población general para determinar si se beneficiaria de estudios radiográficos de screening para el cáncer de pulmón, como es la tomografía anual de pecho de dosis baja para la población en riesgo. Po otro lado, los avances en el conocimiento de biología molecular del cáncer de pulmón, han resultado en nuevas terapias dirigidas e inmunes que indudablemente han mejorado el pronóstico clínico de los pacientes con cáncer de pulmón avanzado.
Lamentablemente el costo de estas nuevas terapias es muy alto para la población latinoamericana. En Latinoamérica este tipo de terapias no ha progresado de la manera que se esperaría, debido a un número de factores propios de países en desarrollo. Estos nuevos avances en de la ciencia han progresado muy lentamente y desafortunadamente la población de pacientes con cáncer de pulmón en la región no se está beneficiando de estas nuevas terapias de tratamiento. La educación del cuerpo médico de Latinoamérica encargados del cuidado y tratamiento cáncer de pulmón es muy importante para ayudar a estandarizar y mejorar el tratamiento de cáncer de pulmón en dichos países.
Comparte esta noticia