¿Cuáles son los beneficios de los anticonceptivos orales?

Recientes estudios mostraron una disminución del 12% en el riesgo de tener cáncer de ovario, después de ingerir anticonceptivos orales durante 1 año, y aproximadamente una reducción del 50% luego de 5 años de uso, según sustenta el doctor Fernando Valencia, ginecólogo de la clínica Oncogyn.

El especialista indicó que el uso de anticonceptivos orales regulan la función hormonal del ovario,  dando por consiguiente disminución del número de quistes ováricos, evitando su multiplicación y desarrollo; así como el crecimiento y aumento del tamaño de los ovarios.

Esto es debido a que los anticonceptivos orales tienen una adecuada concentración de progesterona, capaz de controlar los efectos de los estrógenos, que son las hormonas que en demasía aumentaría el volumen de los tejidos en el ovario, pudiendo incluso, desencadenar estímulos cancerígenos.

Además, los anticonceptivos hormonales tienen una variedad de beneficios en las mujeres, como la mejoría de la dismenorrea (dolor menstrual), corrigiendo los ciclos menstruales irregulares,  previniendo la aparición de los quistes ováricos funcionales, protegiendo contra el cáncer ovárico y la aparición de algunos tumores mamarios.

"Estudios han demostrado que estos fármacos disminuirían la enfermedad pélvica inflamatoria, mejoraría el síndrome premenstrual y el acné en las mujeres", dijo Valencia.

Sin embargo señaló que es estos anticonceptivos podrían tener algunos efectos secundarios, que deberían ser consultados con el médico si se presentaran. Debe tenerse especial cuidado cuando hay antecedentes como la presencia de trombosis o coágulos en la sangre, donde su utilización estaría limitada.

Por eso es muy importante consultar el prospecto específico de cada marca de medicamento, ya que aún cuando coinciden los efectos secundarios generales, cada medicamento tiene sus particularidades”, advierte el galeno.

Asimismo las consecuencias del consumo de anticonceptivos es homogéneo en todas las edades, su  diferencia radicaría en el estilo de vida de las mujeres, siendo las fumadoras y obesas las más perjudicadas.