Cuida tus ojos: parpadear, lavar las pestañas y más

Si miramos a nuestro alrededor cada vez vemos que más gente usa anteojos. ¿Se ha preguntado por qué?

“Hay varias explicaciones, una de ellas es que el paciente es un poco más consciente y está acudiendo más al médico y aparecen cosas que inicialmente no eran diagnosticadas. En el caso de los niños si empiezan a corta edad a jugar con tabletas o celulares demasiado cerca, son más propensos a tener que usar anteojos”, señala el doctor Juan Alberto Dios, miembro de la Academia Americana de Oftalmología.

Enfermedades más frecuentes

Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 246 millones de personas presentan baja visión, y en el Perú ese es un problema que aqueja a alrededor del 30 % de la población, afortunadamente hay más oportunidades de tratamiento. “Las patologías más frecuentes son las ametropías, que son los llamados vicios refractivos como la miopía, hipermetropía, astigmatismo. Lo bueno es que se soluciona con facilidad a través de los anteojos”.

En cambio, la catarata y el glaucoma representan la primera y la segunda causa de ceguera en el mundo. Un diagnóstico temprano es clave. “Lo bueno de la catarata es que es reversible. Si el paciente se somete a una cirugía y no tiene una patología, el pronóstico visual es excelente”.

Signos de alerta

1. Si hay un cambio constante de anteojos, visión borrosa y ojos rojos casi siempre advierte la presencia de cataratas principalmente en adultos mayores, además si hay poca tolerancia a la luz intensa.

2. Cuando la persona ve flashes, manchas y sombras permanentes, posiblemente hay un desgarro o desprendimiento de la retina.

3. El glaucoma si bien no da muchos síntomas, cuando ya está avanzada la enfermedad la persona se suele tropezar o botar cosas.

4. La sensación de cuerpo extraño y un dolor como si se tuviese arenilla en el ojo, puede hablar de pequeñas úlceras en las córneas.

Prevención

1. Los chequeos oculares en el caso de los niños deberían ser antes de los 3 años de edad. Por arriba de los 40 años, la evaluación debería ser anual para descartar alguna discapacidad.     

2. Todos podemos cuidar nuestros ojos, simplemente parpadeando, pues estar concentrados frente a un computador genera sequedad.

3. Una limpieza de pestañas ayuda. “Hacerlo esporádicamente una a dos veces a la semana, con un champú de bebé; se pasa con el dedo como si se estuviera quitándose el maquillaje y ya está”.

4. Evitar malos hábitos como el fumar, el abuso de gotas o colirios o dormir con los lentes de contacto que, “están hechos para que sean útiles durante 10 horas al día. No pueden usarse por más tiempo porque hace que la oxigenación de la córnea sea menor”.

5. Si se van a usar lentes de sol, tenemos que asegurarnos que tengan protección UV, para evitar que la radiación genere problemas visuales como cataratas o degeneración macular.

6. Podemos consumir alimentos como espinacas, zanahorias, fresas, palta, pimientos, camote, brócoli y salmón, ellos nos ayudan a cuidar nuestra salud visual.

Consejo

Los padres que todavía no han llevado a sus hijos a su primera consulta con el oftalmólogo, tienen una forma de evaluar a sus pequeños a partir de los 3 meses de vida. Basta con tomarles una fotografía, eso permite evaluar los reflejos y la posición de los ojos del menor.

El especialista también sugiere que los padres hagan que sus hijos sigan con la mirada algunos estímulos de colores llamativos, pero sin sonido. “Si notamos que sus ojos se irritan con mucha luz y empiezan a estornudar, ya estamos hablando de problemas serios que pueden ser incluso un glaucoma congénito. La evaluación del pediatra ayuda”.