La modelo británica Lauren Wasser sufrió la amputación de su pierna derecha el 2012, debido a un shock tóxico. Cinco años más tarde corre el riesgo de perder la otra pierna.
La modelo británica Lauren Wasser sufrió la amputación de su pierna derecha y de sus dedos del pie izquierdo el 2012, según asegura, por el uso de tampones; cinco años más tarde enfrenta el temor de perder la pierna que le quedaba. Ella tuvo el síndrome de shock tóxico (TSS, por sus siglas en inglés), que puede ser causado por las bacterias estreptococos.
La modelo alega que sí siguió las indicaciones para un buen uso del tampón; sin embargo, contrajo la enfermedad que primero le provocó un infarto y luego la puso al borde de la muerte.
"El shock tóxico es algo que por lo general no debería estar relacionado al uso de tampones, es rarísimo, y se relaciona -en las pocas veces que da- con el mal uso del tapón vaginal, un elemento sumamente seguro pero que debe ser cambiado frecuente, es decir, cada 4 a 6 horas, así se sienta que no está lleno", explica el médico ginecólogo Enrique Flint.
Según el especialista, se deben seguir las medidas de higiene para prevenir alguna infección. De lo contrario, el tampón se vuelve un elemento de cultivo que permite la proliferación de gérmenes en el interior de la vagina. Como consecuencia se produce descenso, mal olor y hasta la muerte, si hay un shock tóxico.
¿LO MISMO OCURRE CON TOALLAS HIGIÉNICAS?
Son menos peligrosas porque no están colocadas al interior de la vagina como el tampón, aunque si la toalla higiénica no se renueva, podría producir vulvitis (irritación de la vulva) a nivel externo.
"Hay mayor peligro con el mal uso de lo que insertas en la vagina, pero solo si hay un mal uso. La gente no tiene por qué tener miedo a seguir usando el tampón", aclara Flint.
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