Debemos recordar siempre que las ideas no se destruyen con gritos, agresiones o burlas, sino con mejores ideas.
En medio de la coyuntura electoral, en que las tendencias de opinión sobre quién es el mejor candidato a la Presidencia de la República, las ideas deben prevalecer. ¿Pero cómo hacemos que esto no se desborde?
De mala forma los contrincantes, lejos de construir nuevas propuestas, se enfrentan con insultos, muestras de intolerancia y faltas de respeto.
“Lejos de una fiesta electoral y de ayudar a crecer como nación o país, se convierte en una pugna que no tiene que ver con el respeto, la tolerancia y el civismo”, afirma el terapeuta familiar y sistémico Ricarte Cortez.
En el programa Siempre en Casa, de RPP Noticias, precisó que en cualquier sistema democrático y libre, debe ser permitido y posible exponer ideas, siempre y cuando se respeten las honras de las personas y no se hable sin fundamento y/o argumento.
Recomendó además tomar en cuenta dos puntos importantes:
1. No podemos pretender que todas las personas estén de acuerdo con nuestras ideas.
2. No se debe agredir a quienes piensan de otra manera (consideremos que esté equivocado o no).
3. La escucha es mucho más que oír para luego decir mi opinión.
Acoger lo que una persona dice, creer que lo hace con buena intención y tratar de entender su posición. Si sus argumentos no convencen, respetar y escuchar para construir una nueva realidad en la que sea compatible, sin agredir.
Indicó que la discusión debe provocar la construcción de nuevas realidades y se debe aportar con las palabras. “Yo puedo ser capaz de discutir contigo y tener opiniones totalmente divergentes, de la índole que sea: religión, política, economía”, acotó.
Las ideas permiten ser destruidas sobre el campo de otras ideas. “Cuando se pretende que las ideas se puedan destruir con gritos, golpes, agresiones, risas, poder, bulla, tiempo o distracción; perdemos todos”, sentenció.
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