Especialistas advierten que la concentración de partículas y agentes tóxicos de origen industrial, aumentan los efectos de los carcinógenos.
Las personas que viven en plena naturaleza, en lugar de habitar en una ciudad con polución, tienen entre 30 y 40% menos probabilidades de sufrir un cáncer, afirmó Antonio Brugarolas, director de la Plataforma de Oncología del Hospital USP San Jaime de España.
El especialista estima que aproximadamente el 5% de los tumores tiene un origen genético y que la exposición a agentes tóxicos durante el trabajo puede estar detrás de un 10% de los casos; mientras que el resto, entre el 80 y el 90% están relacionados con los hábitos personales.
Entre estas conductas, Brugarolas señala como las más comunes: la exposición al Sol, la dieta, el consumo de tabaco y alcohol y el padecimiento de enfermedades.
Sin embargo, el factor responsable de la enfermedad oncológica más conocido es el hollín, la ceniza producida por los restos de material orgánico, los productos de combustión del carbón, petróleo, gasóleo y tabaco, así como las sustancias tóxicas de algunos alimentos.
El doctor ha relatado que la concentración de partículas y agentes tóxicos de origen industrial, aumentan los efectos de los carcinógenos.
Estas partículas siguen un ciclo muy largo y persistente porque pasan al suelo, contaminando las aguas, a las plantas y a los animales. Se estima que cuando la concentración de este tipo de partículas en el aire aumenta un 1%, el riesgo de cáncer de pulmón se incrementa un 14%.
Por otro lado, dijo que es importante mejorar las condiciones de cocción de los alimentos para conservar las propiedades nutritivas y eliminar la aparición de tóxicos. Agregó que los alimentos carbonizados contienen productos cancerígenos conocidos como hidrocarburos aromáticos policíclicos.
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