Las bajas temperaturas registradas en la sierra y la selva durante el presente invierno se han cobrado la vida de 211 menores en el periodo enero-julio de este año.
Más de 30.000 niños menores de cinco años están en riesgo de sufrir neumonías y enfermedades producidas por el frío en Perú, explicó a Efe la representante adjunta de Unicef en el país sudamericano, Melva Johnson.
Las bajas temperaturas registradas en la sierra y la selva peruanas durante el presente invierno austral se han cobrado la vida de 211 menores en el periodo enero-julio de este año, lo que representa la mitad de los muertos por frío registrados por el Ministerio de Salud.
Para evitar las muertes por el frío, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) inició el pasado fin de semana una campaña de recaudación de fondos para comprar ropa de abrigo para los recién nacidos y estufas para los establecimientos de salud de las regiones andinas Puno y Ayacucho, y de las selváticas Loreto y Ucayali.
La campaña durará hasta el próximo 12 de septiembre, aunque Unicef ya ha empezado a enviar materiales con vistas a atender a unos 10.000 menores de dos años de seis regiones.
Además, pedirá a las familias, mediante los medios de comunicación, que abriguen bien a sus hijos y acudan a los centros médicos si observan problemas de salud.
Según Johnson, la neumonía es "totalmente prevenible" y hace falta mejorar la prevención de cara a las próximas bajadas de temperaturas, fenómenos conocidos como "friajes" en la selva y heladas en la sierra, que todavía se espera que lleguen a Perú este año.
Si bien las temperaturas han sido más bajas que otros años, al llegar en torno a los 10 grados en la selva y a los 20 grados bajo cero en los Andes, la representante de Unicef opinó que la respuesta pudo haber sido "más ágil" por parte de todas las entidades nacionales, regionales e internacionales.
Johnson señaló que estos organismos esperaron a que el Gobierno peruano decretase en junio pasado el estado de emergencia por bajas temperaturas en 16 regiones del país para movilizar los fondos de emergencia.
Sin embargo, consideró, los programas de desarrollo y los presupuestos ordinarios deberían haber servido para tomar acciones que disminuyeran los riesgos, como mejorar la calidad de las viviendas en las zonas altoandinas o flexibilizar los horarios del personal sanitario para atender a los afectados por el frío.
En Perú, sólo entre mayo y julio pasados murieron 147 menores de cinco años por las bajas temperaturas, lo que hace pensar que si no se toman las acciones oportunas la cifra anual podría ser mayor a la de 2009, cuando murieron 289 niños, apuntó Johnson. EFE
Las bajas temperaturas registradas en la sierra y la selva peruanas durante el presente invierno austral se han cobrado la vida de 211 menores en el periodo enero-julio de este año, lo que representa la mitad de los muertos por frío registrados por el Ministerio de Salud.
Para evitar las muertes por el frío, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) inició el pasado fin de semana una campaña de recaudación de fondos para comprar ropa de abrigo para los recién nacidos y estufas para los establecimientos de salud de las regiones andinas Puno y Ayacucho, y de las selváticas Loreto y Ucayali.
La campaña durará hasta el próximo 12 de septiembre, aunque Unicef ya ha empezado a enviar materiales con vistas a atender a unos 10.000 menores de dos años de seis regiones.
Además, pedirá a las familias, mediante los medios de comunicación, que abriguen bien a sus hijos y acudan a los centros médicos si observan problemas de salud.
Según Johnson, la neumonía es "totalmente prevenible" y hace falta mejorar la prevención de cara a las próximas bajadas de temperaturas, fenómenos conocidos como "friajes" en la selva y heladas en la sierra, que todavía se espera que lleguen a Perú este año.
Si bien las temperaturas han sido más bajas que otros años, al llegar en torno a los 10 grados en la selva y a los 20 grados bajo cero en los Andes, la representante de Unicef opinó que la respuesta pudo haber sido "más ágil" por parte de todas las entidades nacionales, regionales e internacionales.
Johnson señaló que estos organismos esperaron a que el Gobierno peruano decretase en junio pasado el estado de emergencia por bajas temperaturas en 16 regiones del país para movilizar los fondos de emergencia.
Sin embargo, consideró, los programas de desarrollo y los presupuestos ordinarios deberían haber servido para tomar acciones que disminuyeran los riesgos, como mejorar la calidad de las viviendas en las zonas altoandinas o flexibilizar los horarios del personal sanitario para atender a los afectados por el frío.
En Perú, sólo entre mayo y julio pasados murieron 147 menores de cinco años por las bajas temperaturas, lo que hace pensar que si no se toman las acciones oportunas la cifra anual podría ser mayor a la de 2009, cuando murieron 289 niños, apuntó Johnson. EFE
Comparte esta noticia