Las delaciones de la constructora brasileña ha empezado a acorralar a funcionarios y gobernantes implicados en sobornos y la lista va en aumento.
Los mecanismos ilícitos de Odebrecht para ganar licitaciones en toda América Latina fueron descubiertos gracias a la operación Lava Jato, impulsada por la Policía y las autoridades judiciales de Brasil. En ese proceso fueron encarcelados y sentenciados el presidente de la empresa, Marcelo Odebrecht y decenas de altos cargos de esa firma. En un acuerdo para reducir sus penas estos funcionarios revelaron nombres, fechas y montos bajo de la figura de la delación premiada (Colaboración eficaz).
Estos testimonios aún no han sido revelados y en Brasil y el resto del continente se espera un terremoto político sin precedentes. De momento, el reconocimiento de Odebrecht de haber pagado de 788 millones de dólares en sobornos en 12 países de Latinoamérica y África, ya ha generado varios remezones. El diario El País de España y la Agencia EFE realizaron extensos informes sobre la situación en los países implicados.
BRASIL. Las autoridades descubrieron que seis de las constructoras más importantes del país pagaron sobornos para obtener las licitaciones de Petrobras, la petrolera estatal. Pero también se descubrió que la operación ilícita se repitió en toda América Latina.
Los actos ilícitos empezaron en 2003 y continuaron hasta 2016, periodo en el que Odebrecht pagó "aproximadamente 349 millones de dólares en sobornos a partidos políticos, funcionarios extranjeros y sus representantes". La empresa abonó ese dinero para "asegurar una ventaja indebida para lograr o retener negocios para Oderbrecht", de acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense.
La Fiscalía brasileña calcula que de los 6,400 millones de dólares desviados desde Petrobras, 2,250 millones de dólares fueron a las cajas de Odebrecht. Las filtraciones de las confesiones de los directivos de la constructora ventilados en los medios brasileños, implican al actual presidente Michel Temer. También a los antecesores Dilma Rousseff y Lula da Silva. Este último ya enfrenta a cinco investigaciones.
PERÚ. Odebrecht admitió a fines de diciembre del 2016 haber pagado 29 millones de dólares en sobornos a funcionarios peruanos entre el 2004 y 2014, periodo que abarca los Gobiernos de Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala. Un mes después se dieron las primeras capturas. Edwin Luyo, Miguel Navarro, la exvoleibolista Jessica Tejada y el exviceministro, Jorge Cuba, todos ligados a la recepción de sobornos por la adjudicación del tramo 2 de la Línea 1 del Metro de Lima, recibieron 18 meses de prisión preventiva. La presidenta del comité que otorgó la buena pro de esa obra, Mariella Huerta, se encuentra en Estados Unidos, en condición de prófuga.
Sin embargo, el mayor escándalo ha sido protagonizado por el expresidente Alejandro Toledo, quien es acusado de recibir una coima de 20 millones de dólares. La Fiscalía ha pedido para él 18 meses de prisión preventiva. Toledo se encuentra actualmente en París (Francia) y no faltan las especulaciones sobre si regresará al país o intentará pedir refugio en Israel o Bélgica, amparado en su matrimonio con Eliane Karp, una belga de origen judío.
La Fiscalía Anticorrupción también mantiene abierta una investigación sobre la presunta implicación de Nadine Heredia, esposa del expresidente Ollanta Humala en el pago de los sobornos. En tanto el expresiente Alan García está citado en calidad de testigo por los sobornos de Odebrecht durante su última administración presidencial (2006 a 2011).
COLOMBIA. Odebrecht admitió ante la justicia de Estados Unidos haber pagado en Colombia más de 11 millones de dólares entre 2009 y 2014 para adjudicarse contratos de obras públicas. En ese periodo la constructora brasileña recibió más de 50 millones de dólares de las licitaciones.
El último 7 de febrero, la Fiscalía de ese país solicitó la apertura de una investigación sobre una supuesta "contribución" de un millón de dólares de Odebrecht a la campaña de reelección del actual presidente, Juan Manuel Santos. La Fiscalía, que ha negado tener pruebas físicas de esa acusación, basa su indagación en la declaración del detenido exsenador Otto Baula. Bajo juramento, admitió haber dado el dinero al gerente de la campaña de Santos, Roberto Prieto, a través de un intermediario. Baula fue detenido a mediados de enero por supuestamente haber recibido un soborno de la constructora para la adjudicación de una obra.
Las autoridades colombianas también han encarcelado a Gabriel García Morales, quien fue viceministro de Transportes durante del Gobierno de Álvaro Uribe. De acuerdo con las investigaciones, habría recibido 6,5 millones de dólares por favorecer con un contrato a la firma brasileña.
ARGENTINA. La constructora pagó, entre 2007 y 2014, más de 35 millones de dólares a "intermediarios con el acuerdo de que esos pagos pasarían, en parte, a funcionarios del Gobierno". Esos sobornos tenían relación con "al menos tres proyectos de infraestructura" y, como consecuencia, la compañía se llevó unos beneficios de 278 millones de dólares. El escándalo, que inicialmente apuntaba a funcionarios del kirchnerismo ahora toca de lleno al entorno del presidente Mauricio Macri.
El diario La Nación reveló que Gustavo Arribas, amigo muy cercano del mandatario y actual jefe de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), recibió en el 2013 una transferencia de 600 mil dólares del hombre de Odebrecht en Argentina, Leonardo Meirelles. El medio sostiene que se trataría de una coima por la obra del tren Sarmiento, en la que tuvo participación Angelo Calcaterra, primo de Macri. El gobierno argentino ha desmentido esos señalamientos y el presidente ha defendido a Arribas.
MÉXICO. Odebrecht reconoció el pago de 10.5 millones de dólares en sobornos entre octubre de 2013 y finales de 2014. Las coimas se entregaron a altos funcionarios de una empresa controlada por el Estado mexicano no identificada. De momento, se conoce que hay dos proyectos otorgados por Petróleos Mexicanos (Pemex) a Odebrecht: El gasoducto Los Ramones (450 kilómetros de longitud) al norte del país, y el acondicionamiento del terreno para la refinería de Tula, Hidalgo. La Secretaría de la Función Pública (SFP) hasta ahora no ha presentado avances en su investigación.
VENEZUELA. La compañía pagó unos 98 millones de dólares entre 2006 y 2015 a "funcionarios e intermediarios del Gobierno" para "obtener y retener contratos de obras públicas". Odebrecht pagó por información confidencial sobre las concesiones y proyectos.
PANAMÁ. El país centroamericano dictó una orden de búsqueda y captura contra dos hijos del expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) a los que la banca suiza ha congelado cuentas por valor de 22 millones de dólares que les entregó Odebrecht, según las delaciones procedentes de la propia empresa. También en Panamá, la Fiscalía General ha formulado cargos contra Amado Barahona, director de la Unidad de Análisis Financiero (UAF) del gobierno (2004-2009) de Martín Torrijos. Odebrecht también ha llegado a un acuerdo con las autoridades de Panamá para colaborar con la investigación y pagar un indemnización de 59 millones de dólares.
REPÚBLICA DOMINICANA. Odebrecht desembolsó 92 millones de dólares, entre 2001 y 2014 a funcionarios oficiales e intermediarios y, como resultado, obtuvo unos beneficios de 163 millones de dólares. La constructora brasileña acordó con el país caribeño el pago de una reparación de 184 millones de dolares en varios desembolsos durante 8 años. El pasado 1 febrero Odebrecht abonó los primeros 30 millones de dólares.
ECUADOR. Entre 2007 y 2016 Odebrecht pagó 33.5 millones de dólares en sobornos a funcionarios ecuatorianos, lo que generó 116 millones de dólares en beneficios para la constructora brasileña. Como parte de sus investigaciones la fiscalía ecuatoriana ha pedido apoyo al gobierno español en el interrogatorio a Rodrigo Tecla Duran, un abogado de Odebrecht detenido en el país Europeo a pedido de las autoridades brasileñas. Tecla Duran es señalado como el responsable del pago de las coimas a cambio de la adjudicación de contratos en Ecuador.
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