La joven, capturada por el Estado Islámico cuando tenía 14 años, relata como los terroristas se repartían a las niñas para explotarlas sexualmente.
Ekhlas tenía 14 años cuando el Estado Islámico llegó en agosto de 2014 a su pueblo, en el norte de Irak, y vio como mataron a varios hombres y la secuestraban junto a miles de mujeres Yazidíes. "Mataron a mi padre frente a nuestros ojos. Vi su sangre en sus manos. Vi a un hombre de unos 40 años sobre una niña de unos 10. La niña gritaba", relató.
Después de ser vendida a un combatiente, Ekhlas fue violada todos los días durante seis meses y estuvo a punto de suicidarse. "Él me escogió entre 150 niñas. Era tan feo, como una bestia, con pelo largo. Olía tan mal… tenía tanto miedo que no podía ni mirarlo. Me violó todos los días, durante seis meses. Traté de matarme", dijo en una entrevista con la BBC.
Apoyo en Alemania. Ella esperó a que su captor volviese al campo de batalla para escapar a un campo de refugiados. Fue llevada a un campo de refugiados y allí conoció a Jaqueline Isaac, una abogada estadounidense que se encarga de reubicar a los niños dentro de países de la Unión Europea (UE).
Actualmente, Ekhlas, de 16 años, se encuentra en un hogar en Alemania, recibiendo terapia para lidiar con su pasado. "Mi dolor es como el de 100 muertes", confiesa la joven que quiere convertirse en abogada.
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