Crisis energética
Hoy las acciones mundiales caían por tercer día consecutivo por temor a que los precios de la energía frenen el crecimiento económico. | Fuente: Reuters

En las últimas semanas los precios de la energía han alcanzado niveles récord, impulsados ​​por la escasez energética en Asia, Europa y Estados Unidos, que duraría hasta fines de este 2021.

Con la reactivación tras la paralización generada por la pandemia, la fuerte demanda de materias primas ha complicado las cadenas de suministro, derivando en una crisis para diversas economías.

Además de la alta demanda, la situación se está complicando pues diferentes fenómenos ambientales como el fuerte invierno en Europa o la ola de huracanes han reducido la producción de carbón, petróleo y gas.

La escasez de suministro en los componentes de energía y manufacturas ya está generando inquietud en los mercados, pues se teme que la situación frene el crecimiento económico global y eleve aún más los ya altos niveles de inflación.

Según indica Reuters, este martes el mercado mundial de acciones y bonos se tambaleaban ante el temor por los crecientes costos de la energía.

De esta manera, mientras las acciones mundiales caían por tercer día consecutivo, el rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a niveles máximos en 18 meses.

Ante la crisis, China ha anunciado que liberalizará aún más los precios de la energía a carbón y obligará a los consumidores industriales y comerciales a comprar en el mercado.

En China la producción de industrias como el cemento, el acero y el aluminio se han visto afectadas, pues los productores de energía, incapaces de pagar el carbón, redujeron su actividad.

Mientras que en India, el Ministerio de Energía advirtió a los estados que los productores federales de energía reducirán el suministro si se descubre que sus firmas de servicios públicos venden energía para aprovechar el aumento de los precios.

El país asiático ahora se enfrenta a apagones a gran escala, ya que varias centrales eléctricas tienen inventarios de carbón bajos como resultado del fuerte aumento de los precios mundiales de la energía.

(Con información de Reuters).