Comer en exceso en fiestas de fin de año puede generar un desbalance en las grasas que pueden acumularse en el tejido adiposo y traducirse en aumento de peso
Las fiestas de fin de año y celebraciones en general del mes de diciembre suelen ser frecuentes y abundantes en cuanto a comidas y bebidas azucaradas o con alcohol.
Estos abusos pueden generar un desbalance en las grasas que pueden acumularse en el tejido adiposo y traducirse en aumento de peso, puede favorecer también la acumulación de grasa en el hígado así como la elevación de grasa de tipo triglicéridos y colesterol en sangre. Por otro lado, nuestro hígado que funciona como un laboratorio que procesa y transforma diversos compuestos que llegan del alimento y el alcohol, puede necesitar de un descanso trabajando menos.
Frente a estas posibilidades la mayoría nota el aumento de peso más no los desbalances internos. La incomodidad del sobrepeso y la indigestión no superada puede inducir a buscar formas rápidas poco seguras de solucionar esos problemas como las famosas dietas desintoxicantes.
Estas dietas suelen caracterizarse por dar algún tipo de alimento o preparación que suele ser fruta o verdura natural para ser consumida cuanto uno quiera y las veces que quiera. Esta también la recomendación de dar solo alimentos líquidos por unos días prometiendo reducir varios kilos en corto tiempo.
Estas alternativas si bien pueden reducir el peso debido a que reduce drásticamente el ingreso de calorías, no son saludables ni sostenibles en el tiempo. Una vez que se regresa a la alimentación habitual, el peso perdido se recupera incluso más de lo que uno estaba inicialmente.
Lo saludable es siempre lo mejor, recuerde que su hígado puede estar sobre exigido y necesite relajar su trabajo por unos días.
Aquí algunas recomendaciones para descargar el trabajo digestivo:
- Consumir alimento bajos en grasa y sin aditivos es oportuno, evite los aceites, frituras, cremas de leche, y toda fuente de alimento graso.
- Opte por preparaciones de pocos ingredientes y que requieran cocciones simples como el horno, sancochado, vapor o plancha. Reduzca el condimento a la preparación habitual.
- Por un par de semanas no consuma productos envasados que tengan aditivos.
- Beba suficiente líquido no azucarado, en promedio se recomiendan de 6 a 8 vasos de líquidos naturales al día.
- Un desayuno sugerido puede ser una taza de fruta picada (papaya, piña, sandía) un vaso de leche o yogurt descremado y 50 gramos de queso fresco o 1 huevo duro.
- A media mañana y media tarde opte por un yogurt descremado o una barra de cereal bajo en calorías o una fruta fresca (la que desee).
- Un almuerzo y cena sugerido un plato grande de ensalada de vegetales de diversos colores más 120 g de algún tipo de carne baja en grasa al horno, plancha, en guiso con verduras o al vapor, más una guarnición (ej, ½ papa, camote, choclo sancochados). Evite el uso de aceites, cremas, salsas para la preparación.
Incluir ejercicio físico diariamente entre 45 minutos y 1 hora más los cuidados arriba mencionados, puede ayudarlo a perder esos kilos ganados. Estas indicaciones no reemplazan la consulta con el especialista en nutrición. (Por: licenciada Sara Abu Sabbah, nutricionista y conductora de Siempre en Casa)
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Conductoras: Sara Abu Sabbah y Ana Sayán
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