El rechazo de la población se expresa a través de pintas en los asientos.
Los pobladores continúan manifestando su descontento por los altos precios del pasaje del transporte público en el Brasil.
Los ciudadanos de Río de Janeiro se ven obligados a pagar un bus que cuesta tres veces más caro que en el Perú.
Las últimas protestas en todo el Brasil contra el aumento de los pasajes lograron mantener el precio en dos reales con 75 centavos, equivalente a casi un 1.30 dólares.
Asimismo, el precio del ticket en el metro de Río cuesta 3.20 reales, equivalente a casi un dólar y medio.
El rechazo de la población se expresa a través de pintas en los asientos. Para algunos, la visita del papa Francisco ayuda a calmar los ánimos, por el momento.
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