Ramón Carrera, padre de obrero sepultado en obra ilícita, dijo que autorizó operación porque lo quiere vivo. ´Estoy entre la espada y la pared´, dijo entre sollozos.
Más de 40 minutos duro la intervención quirúrgica por medio de la cual se le amputó parte de las piernas al obrero Luis Alberto Carrera (24), quien permaneció sepultado por más de nueve horas luego que una pared de tres metros de altura le cayera encima cuando laboraba en una obra sin licencia de funcionamiento.
Posteriomente, el joven fue trasladado al hospital Dos de Mayo, donde los galenos lucharán por estabilizar su salud.
Por la tarde, Ramón Carrera, padre del desafortunado trabajador informó a RPP que autorizó el cercenamiento de las extremidades inferiores de su hijo porque lo prefiere con vida.
"Estoy con los nervios destrozados. Nos han puesto entre la espada y la pared. Si no doy la autorización para que a mi hijo le seccionen la pierna o el pie se muere allí. Entonces lo lógico, cualquier ser humano diría: prefiero que le corten", declaró
Hasta el lugar, ubicado en en la cuadra cuatro del jirón Tarata, en Barrios Altos (Cercado de Lima), también llegó, por la tarde, la ministra de Trabajo, Manuela García, quien responsabilizó a Godofredo Mondragón Hurtado y Shirley Casalino Luna por el accidente ocurrido.
Detalló que los mismos enfrentarán el rigor de la ley y adelantó que se abrirá un proceso de investigación a cargo de su cartera, la Fiscalía de la Nación y el Poder Judicial.
Posteriomente, el joven fue trasladado al hospital Dos de Mayo, donde los galenos lucharán por estabilizar su salud.
Por la tarde, Ramón Carrera, padre del desafortunado trabajador informó a RPP que autorizó el cercenamiento de las extremidades inferiores de su hijo porque lo prefiere con vida.
"Estoy con los nervios destrozados. Nos han puesto entre la espada y la pared. Si no doy la autorización para que a mi hijo le seccionen la pierna o el pie se muere allí. Entonces lo lógico, cualquier ser humano diría: prefiero que le corten", declaró
Hasta el lugar, ubicado en en la cuadra cuatro del jirón Tarata, en Barrios Altos (Cercado de Lima), también llegó, por la tarde, la ministra de Trabajo, Manuela García, quien responsabilizó a Godofredo Mondragón Hurtado y Shirley Casalino Luna por el accidente ocurrido.
Detalló que los mismos enfrentarán el rigor de la ley y adelantó que se abrirá un proceso de investigación a cargo de su cartera, la Fiscalía de la Nación y el Poder Judicial.
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