Sara Judith Alejos Domínguez dijo a la Policía que raptó a la menor porque estaba obsesionada con tener un hijo, ya que perdió a su bebé cuando tenía siete meses de gestación.
Sara Judith Alejos Domínguez, de 20 años, confesó que el pasado 1 de setimbre secuestró a la pequeña Bayolet, de apenas dos años, tras engañar a la madre de la menor que se la encargó en los exteriores del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, en el Centro de Lima.
Durante su presentación en la sede de la Dirección de la Investigación Criminal (Dirincri), el jefe de dicha división policial, el general César Cortijo Arrieta, informó que la mujer indicó que estaba obsesionada con tener un hijo, ya que perdió a su bebé cuando tenía siete meses de gestación.
La autoridad indicó que inicialmente Alejos Domínguez había declarado a la Policía que su media hermana Milagros Alejos Vásquez le había entregado a la menor, pero se comprobó que tal identidad no figura en la base de datos de la Reniec y, por tanto, era falsa.
Anotó que la madre de la menor, Katty Córdova, quien tuvo contacto directo con ella antes que se llevara a su hija, ha “identificado plenamente” a la mujer, como quien raptó a Bayolet el pasado 01 de setiembre.
El jefe de la Dirincri detalló que Sara Judith Alejos Domínguez exprofesamente viajó de la provincia de Sihuas (Áncash) rumbo a Lima el 30 de agosto pasado.
Narró que tras lograr su cometido, la joven de inmediato se trasladó vía terrestre a Chimbote, donde estuvo hasta el 8 de setiembre, luego viajó a Sihuas donde permaneció por cuatro días.
El jefe policial refirió que la secuestradora retornó el 12 de setiembre a Chimbote, donde consiguió un empleo de doméstica.
Fue recién el 14 de setiembre cuando al ver la noticia del rapto en los medios, que "le toca las fibras más íntima de su ser" y confiesa a su empleador lo que había hecho, pero es despedida.
Finalmente, la mujer abandonó a Bayolet en un mercado en Chimbote, donde fue encontrada por Olinda Ramírez Alvarado, quien dio parte a la Policía Nacional.
Alejos Domínguez retornó a Sihuas, donde moradores de la zona que se habían percataron de que ella había tenido en su poder a una niña que no era su hija, dieron parte a los efectivos locales, produciéndose su detención preventiva y posterior traslado a Lima.
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