El sospechoso del tiroteo, Robert Bowers de 46 años, fue puesto bajo custodia y podría enfrentar la pena de muerte luego de ser acusado de múltiples cargos de asesinato y delitos de odio por el ataque a una sinagoga.
El atacante de la sinagoga de Pittsburgh evocó "el genocidio y su deseo de matar judíos" durante el tiroteo, dijeron el domingo las autoridades estadounidenses, que confirmaron que los 11 muertos ya fueron identificados.
El sospechoso, Robert Bowers, de 46 años, quien fue puesto bajo custodia después de un enfrentamiento con la policía, podría enfrentar la pena de muerte luego de ser acusado de múltiples cargos de asesinato y delitos de odio por el ataque del sábado.
"Durante el curso de su ataque mortal contra la gente de la sinagoga, Bowers evocó el genocidio y su deseo de matar judíos", dijo Scott Brady, fiscal del distrito oeste de Pennsylvania, en conferencia de prensa.
Identifican a víctimas
Tras calificar de desgarrador el proceso de identificar a las víctimas y notificar a sus familias, los funcionarios revelaron el domingo los nombres de las 11 personas asesinadas durante el tiroteo en la sinagoga.
"Después del difícil trabajo realizado por la oficina del médico forense, las 11 víctimas fueron identificadas positivamente y se llevaron a cabo las notificaciones de los parientes más cercanos", dijo Robert Jones, el agente del FBI a cargo de la investigación, en la conferencia de prensa que tuvo lugar a primera hora de la mañana.
Las víctimas, tres mujeres y ocho hombres, todas de Pittsburgh y los suburbios de la ciudad, tenían entre 54 y 97 años e incluían dos hermanos y una pareja casada.
(Con información de AFP)
Comparte esta noticia