El debate de este domingo, será el primer cotejo de la segunda vuelta entre la candidata del Partido de los Trabajadores (46,91%), y el abanderado del Partido de la Social Democracia Brasileña (32,61%).
Los candidatos a la Presidencia deBrasil, la oficialista Dilma Rousseff y el opositor José Serra, inician mañana una serie de cinco debates en televisión, que podrían ser claves para convencer a los indecisos en las elecciones del próximo día 31.
El debate de mañana, organizado por el canal Bandeirantes, será el primer cotejo de la segunda vuelta entre la candidata del Partido de los Trabajadores (PT), que obtuvo el 46,91% de los votos el pasado domingo, y el abanderado del Partido de la Social DemocraciaBrasileña (PSDB), que recibió el 32,61%.
También será el primer cara a cara entre ambos sin el concierto de los candidatos minoritarios, que fueron invitados a los debates de la primera vuelta, que por lo general fueron tibios, con escasas acometidas dialécticas y muy pocas promesas.
En el último debate, celebrado por la televisión Globo a tres días de las elecciones, Rousseff y Serra eludieron la confrontación directa y dirigieron todas sus intervenciones a los candidatos minoritarios.
Ahora, los aspirantes a suceder al presidente Luiz Inácio Lula da Silva se verán obligados a comparar sus respectivos planes de Gobierno y lucir su capacidad oratoria para atraer los cerca de 20 millones de votantes que se inclinaron por otros candidatos el pasado 3 de octubre.
En este capítulo, Serra se siente más cómodo, puesto que cuenta con una larga experiencia electoral, en la que ha hecho campaña para alcalde, gobernador, diputado, senador y presidente, cargo al que optó y perdió hace ocho años ante Lula.
Se espera que el socialdemócrata esgrima una estrategia más agresiva para desgastar la imagen de su contrincante y tratar de recortar los 14 puntos que ahora los distancia.
La candidata del PT, que nunca antes se había presentado a unas elecciones, fue algo insegura en los primeros debates, aunque este factor no fue un impedimento para su claro triunfo en las urnas.
Previsiblemente, Rousseff va a mantener la estrategia de la primera ronda: apegarse a la imagen de Lula, que goza de una elevadísima popularidad, y recopilar los éxitos de su Gobierno, en el que ella dirigió los ministerios de Minas y Energía y de Presidencia.
Los debates en televisión son considerados como uno de los actos más decisivos en la campaña por su gran difusión, que le permite a los candidatos alcanzar todos los rincones de este país de dimensiones continentales.
El primer debate tendrá lugar en los estudios en Sao Paulo de la televisión Bandeirantes y comenzará a las 22.00 hora local de este domingo (01.00 GMT del lunes).
La emisora explicó que el debate estará dividido en cinco bloques. En el primero, un periodista le realizará la misma pregunta a ambos candidatos y en el resto, Rousseff y Serra se interpelarán y replicarán libremente durante cerca de dos horas.
Los demás debates previstos serán organizados por el canal Rede TV! y el diario Folha de Sao Paulo (día 17), SBT (día 22), Record (día 25) y Globo (día 29), según las fechas que fueron anunciadas por las emisoras. EFE
El debate de mañana, organizado por el canal Bandeirantes, será el primer cotejo de la segunda vuelta entre la candidata del Partido de los Trabajadores (PT), que obtuvo el 46,91% de los votos el pasado domingo, y el abanderado del Partido de la Social DemocraciaBrasileña (PSDB), que recibió el 32,61%.
También será el primer cara a cara entre ambos sin el concierto de los candidatos minoritarios, que fueron invitados a los debates de la primera vuelta, que por lo general fueron tibios, con escasas acometidas dialécticas y muy pocas promesas.
En el último debate, celebrado por la televisión Globo a tres días de las elecciones, Rousseff y Serra eludieron la confrontación directa y dirigieron todas sus intervenciones a los candidatos minoritarios.
Ahora, los aspirantes a suceder al presidente Luiz Inácio Lula da Silva se verán obligados a comparar sus respectivos planes de Gobierno y lucir su capacidad oratoria para atraer los cerca de 20 millones de votantes que se inclinaron por otros candidatos el pasado 3 de octubre.
En este capítulo, Serra se siente más cómodo, puesto que cuenta con una larga experiencia electoral, en la que ha hecho campaña para alcalde, gobernador, diputado, senador y presidente, cargo al que optó y perdió hace ocho años ante Lula.
Se espera que el socialdemócrata esgrima una estrategia más agresiva para desgastar la imagen de su contrincante y tratar de recortar los 14 puntos que ahora los distancia.
La candidata del PT, que nunca antes se había presentado a unas elecciones, fue algo insegura en los primeros debates, aunque este factor no fue un impedimento para su claro triunfo en las urnas.
Previsiblemente, Rousseff va a mantener la estrategia de la primera ronda: apegarse a la imagen de Lula, que goza de una elevadísima popularidad, y recopilar los éxitos de su Gobierno, en el que ella dirigió los ministerios de Minas y Energía y de Presidencia.
Los debates en televisión son considerados como uno de los actos más decisivos en la campaña por su gran difusión, que le permite a los candidatos alcanzar todos los rincones de este país de dimensiones continentales.
El primer debate tendrá lugar en los estudios en Sao Paulo de la televisión Bandeirantes y comenzará a las 22.00 hora local de este domingo (01.00 GMT del lunes).
La emisora explicó que el debate estará dividido en cinco bloques. En el primero, un periodista le realizará la misma pregunta a ambos candidatos y en el resto, Rousseff y Serra se interpelarán y replicarán libremente durante cerca de dos horas.
Los demás debates previstos serán organizados por el canal Rede TV! y el diario Folha de Sao Paulo (día 17), SBT (día 22), Record (día 25) y Globo (día 29), según las fechas que fueron anunciadas por las emisoras. EFE
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