Francia: Le Pen y Mélenchon pujan por liderar la oposición contra Macron

La ultraderechista Marine Le Pen y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, los dos grandes derrotados en las recientes elecciones presidenciales francesas, pujan por convertirse en líderes de la oposición al ganador, Emmanuel Macron, para lo cual buscarán ser los más votados en las legislativas de junio próximo.

"Las legislativas tienen un papel secundario en Francia, la participación será más baja. Ni Le Pen ni Mélenchon cuentan con suficiente integración local", explicó el politólogo Luc Rouban a Efe.

Así, la dinámica de pasadas ediciones muestra que el electorado de los candidatos perdedores en las presidenciales se desmotiva y acude menos a las urnas en las legislativas. Todo lo contrario que los del ganador, a quien quieren otorgar una mayoría amplia para que pueda aplicar su programa.

Además, como apunta Éric Brehier, de la Fundación Jean Jaurès, es poco probable que los opositores a Macron se unan en dos bloques, lo que reducirá también su peso en la Asamblea Nacional.

Negociaciones

Para preparar las legislativas han comenzado ya las conversaciones internas para constituir dos grandes bloques, uno a la derecha y otro a la izquierda, que puedan enfrentarse al partido macronista, La República En Marcha (LREM).

En el campo de la derecha, el ultraderechista Éric Zemmour, cuarto de la primera vuelta de las presidenciales, tendió la mano a Le Pen, la noche electoral del pasado domingo, aunque no ocultó las críticas a la líder.

Desde el partido lepenista la respuesta fue tajante y, por boca de Jordan Bardella, mano derecha de la líder, aseguró que presentarían candidaturas en todas las circunscripciones, lo que se traduce en un portazo a la oferta de alianza de Zemmour.

El propio Jean-Marie Le Pen, padre de la líder ultraderechista y fundador de su partido, apeló a esa unión, aunque precisó que debería articularse bajo el nombre de su hija.

Zemmour también apeló a que se sumaran a su "amplia alianza de todas las derechas" a los conservadores moderados de Los Republicanos.

Este partido, que con 101 diputados es el segundo más numeroso en la actual Asamblea, mantuvo, hoy martes, una reunión de su Consejo Estratégico en el que rechazó diluirse en otras alianzas, aunque las encuestas auguran que perderá la mitad de su representación.

Las alianzas tampoco avanzan en la izquierda, donde Mélenchon, tercero en las presidenciales, se ha erigido como el artífice de la conformación de un bloque unido.

Su formación, La Francia Insumisa, multiplica los contactos con los ecologistas y está prevista una reunión mañana miércoles con el Partido Socialista, aunque el peso electoral de este último ha caído de forma considerable desde que su candidata, Anne Hidalgo, se quedó en el 1,75 % en la primera vuelta de las presidenciales.

El exprimer ministro Lionel Jospin consideró en el diario La Parisien que "sería positivo para el PS participar en un acuerdo electoral de toda la izquierda", aunque no todo el mundo en el partido está dispuesto a aliarse con Mélenchon.

Muchas de sus figuras, de hecho, han partido ya hacia el campo macronista o se disponen a hacerlo.

Mélenchon está convencido de que si la izquierda se presenta unida puede lograr una mayoría en la cámara que le permita ser primer ministro y frenar algunas de las reformas que prometió Macron, como el retraso de la edad de jubilación.

Proyecciones

La dinámica de los sondeos le es favorable a la derecha francesa y, según las proyecciones basadas en el voto de las presidenciales, la ultraderecha podría tener entre 117 y 147 diputados, lo que le convertiría en el segundo grupo de la Asamblea Nacional.

Esa cifra solo estaría superada por LREM, a quien otorgan entre 328 y 368 escaños de los 577 que componen la cámara baja, una amplia mayoría absoluta.

Un reciente sondeo, publicado por la revista Challenges, no otorga ningún escaño a Zemmour si acude por su cuenta, lo que explica los llamamientos de sus lugartenientes a la unidad con Le Pen lanzados a través de las redes sociales.

El sondeo que publica Challenger otorga al partido de Mélenchon entre 25 y 45 diputados si se presenta en solitario y que, en caso de alianza, no lograría más escaños que si cada partido concurre por separado. (EFE)