El aparato, un An-12, se precipitó a tierra en la región de Magadán, en el extremo oriente de Rusia. Al parecer, uno de los motores dejó de funcionar, provocando la tragedia.
Once personas murieron hoy tras estrellarse un avión de carga ruso An-12 en la región de Magadán, en el extremo oriente de Rusia, informó la Fiscalía de Transporte rusa.
Con anterioridad, las autoridades locales habían indicado que el avión con dos tripulantes y nueve pasajeros a bordo había desaparecido de los radares, cuando sobrevolaba la región de Magadán.
Poco antes de desaparecer de las pantallas de los controladores aéreos, los pilotos del avión informaron a la torre de control de un incendio en uno de los motores y comunicaron su decisión de retornar al aeropuerto de Magadán, desde donde habían despegado poco antes.
Un portavoz de Rosavia, la agencia de aviación civil rusa, precisó a la agencia Interfax que, además de sus seis tripulantes, en el aparato viajaban dos técnicos, y tres personas más, que de momento no han sido identificadas.
El Comité de Instrucción de Rusia ha instruido una causa por violación de las normas de seguridad y preparación de vuelos, afirmó Vladímir Markin, portavoz de la cartera.
El An-12, diseñado en los años 50, es un turbohélice cuatrimotor con una autonomía de vuelo de 3.500 kilómetros y puede transportar hasta diez toneladas de carga útil.
-EFE-
Comparte esta noticia