El Gobierno argentino analiza nuevas medidas de prevención para frenar el avance local de la pandemia.
Argentina sumó su segunda víctima mortal por el nuevo coronavirus y tres nuevas personas infectadas, lo que eleva a 34 el total de casos de COVID-19 en el país suramericano mientras el Gobierno analiza nuevas medidas de prevención para frenar el avance local de la pandemia.
El Ministerio de Salud informó anoche que dos de los tres nuevos casos son ciudadanos con antecedentes de viaje a países con alta circulación de COVID-19, mientras que el tercero es un contacto estrecho de otro paciente con coronavirus confirmado anteriormente.
En tanto, un hombre de 61 años que tenía enfermedades preexistentes es la segunda víctima mortal por coronavirus en Argentina, confirmaron este viernes fuentes oficiales.
La víctima es el ingeniero César Cotichelli, profesor de la Universidad Tecnológica Nacional, quien había vuelto hace unos días de un viaje por Europa y al momento de su muerte se encontraba internado en grave estado en un sanatorio privado de la provincia norteña de Chaco.
Según fuentes del Gobierno provincial, el hombre había dado positivo en COVID-19 este jueves.
La víctima, que fue empleado de carrera de la empresa estatal Servicios Energéticos del Chaco y presidente de su directorio entre 2013 y 2015, arrastraba otras dolencias: fue intervenido en diciembre pasado de una hernia, padecía hipertensión, diabetes y problemas coronarios, y hace un año y medio también tuvo una neumonía.
Este fallecimiento es el segundo en Argentina por COVID-19, después de que el pasado 7 de marzo las autoridades reportaran la muerte de un paciente de 64 años, residente de Buenos Aires, que había estado en Europa y padecía diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal.
Casos importados y locales
La mayoría de los casos de coronavirus confirmados en Argentina son importados, aunque desde el jueves se detectaron cuatro afectados que contrajeron la enfermedad en el país y que han tenido "contactos estrechos" con personas que se contagiaron en países con alta circulación de COVID-19, mientras que no se ha constatado aún una "transmisión comunitaria".
Para evitar la propagación del virus en el país, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, decretó la emergencia sanitaria por el coronavirus, lo que, entre otras medidas, conllevará suspender durante 30 días los vuelos internacionales provenientes de Europa y Estados Unidos, entre otras zonas afectadas por la enfermedad.
Este jueves, al anunciar la emergencia en un mensaje emitido por cadena nacional, Alberto Fernández indicó que, además, se fortalecerán los controles sanitarios en todos los puntos de ingreso a Argentina: "Seremos muy estrictos en el monitoreo del movimiento de personas en nuestras fronteras". (EFE)
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