El Año de la Cabra, que finaliza el próximo 8 de febrero, es uno de los signos menos populares en la civilización oriental.
El número de nacimientos en China bajó un 1,89 % en 2015 hasta los 16,55 millones, la primera bajada de este indicador en demográfico en cinco años, algo que los expertos atribuyen a que en el zodíaco chino fue Año de la Cabra, uno de los signos menos populares en la civilización oriental.
Según el oficial China Daily, el Año de la Cabra (que finaliza el próximo 8 de febrero con la entrada de un año consagrado al mono) fue la causa de este descenso, que además se produjo en los últimos 12 meses de aplicación de la política del hijo único.
La tradición china dice que nueve de cada diez niños nacidos bajo el signo de la cabra serán desafortunados en su vida, lo que afectaría a aquellos nacidos en 2015 pero también en 2003, 1991, 1979 o 1967, entre otros años.
El Buró Nacional de Estadísticas fue el que dio el dato de nacimientos del pasado año, 320.000 menos que en 2014, aunque se espera un fuerte repunte en 2016 con la entrada en vigor de la norma que permite a todas las familias chinas tener dos hijos, lo que beneficiará a 11 millones de parejas.
El Gobierno chino espera que con la entrada en vigor de la "política de los dos hijos" nazcan este año alrededor de un millón de niños más en el país más poblado del planeta y con ello se llegue a los 17 millones de bebés anuales, una cifra que el país aún no ha conseguido alcanzar en lo que va de siglo.
A la larga, se espera que el número de nacimientos anuales en el país ascienda a 20 millones, una cifra que China alcanzó por última vez en 1997.
Después de 35 años de política del hijo único el gigante asiático ha optado por relajar un poco el control demográfico, para frenar el envejecimiento de su pirámide poblacional y ante la creciente falta de mano de obra. EFE
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