La ex primera dama de Estados Unidos padece de una obstrucción pulmonar crónica que afecta su capacidad cardiaca.
Barbara Bush (92), ex primera dama de los Estados Unidos y cuyo estado de salud es delicado desde hace años, decidió que no volverá a acudir al hospital y que de ahora en adelante, se someterá a "tratamientos paliativos" en su propio hogar, según informaron fuentes cercanas a la familia.
"Tras una serie de hospitalizaciones recientes, y tras haber consultado con sus familiares y médicos, ha decidido no someterse a tratamientos médicos adicionales y en vez de eso se centrará en tratamientos paliativos", anunció el portavoz de la familia Bush, Jim McGrath, en un comunicado.
La esposa del expresidente George H. W. Bush (1989-1993) y madre del también exmandatario George W. Bush (2001-2008) hace tiempo que padece una obstrucción pulmonar crónica. Ello afecta su capacidad cardíaca, lo que le ha llevado a ser ingresada en numerosas ocasiones a lo largo de los últimos años.
"A nadie que conozca a Barbara Bush le sorprenderá saber que ha sido una roca frente a su deteriorada salud, preocupándose -gracias a su fe- no de sí misma, sino de los otros", agrega el comunicado. Aunque McGrath no ha querido profundizar en si se ha producido algún cambio en su estado de salud que haya llevado a la exprimera dama a tomar esta decisión, la portavoz apuntó que Barbara Bush se encuentra "rodeada de una familia que adora".
EFE
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