El asesino le daba a los pacientes medicamentos para producirles un fallo cardíaco y quedar como un héroe luego de reanimarlos.
La Policía de Alemania informó este lunes que estima que el exenfermero Niel Högel pudo haber matado entre 90 a 180 personas tras 12 años de investigación. El asesino le daba a los pacientes medicamentos para producirles un fallo cardíaco y quedar como un héroe luego de reanimarlos.
“Después de 134 exhumaciones, y varios cientos de testimonios, podemos probar al menos 90 asesinatos y al menos hay otros tantos que no podemos probar", dijo a la prensa el jefe de la investigación, Arne Schmidt.
¿Cómo lo hacía? Hogel daba medicamentos a los pacientes para que les dé un fallo cardíaco o un colapso circulatorio, para luego tratar de reanimarlos y quedar así ante sus colegas, explicó la Policía.
En una rueda de prensa, el presidente de la policía de Oldenburgo, Johann Kühme, indicó que muchos de los pacientes fallecidos fueron incinerados, por lo que la cifra de muertes atribuibles al exenfermero, de 40 años, podría ser aún mayor.
Los hechos se produjeron entre los años 2003 y 2005 en dos clínicas, en las ciudades de Delmenhorst y Oldenburgo, en el noroeste del país, y el exenfermero utilizó un total de cinco medicamentos distintos. (Con información de EFE)
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