La monarca británica recibió este viernes al presidente de los Estados Unidos y su esposa. Cuando comenzaron a revista a las tropas, una descoordinación entre ambas figuras llamó la atención.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó este viernes al castillo de Windsor, a 40 kilómetros de Londres, para tomar el té con la reina Isabel II de Inglaterra, el último acto de su visita oficial al Reino Unido. Ambos pasaron revista a las tropas en un recorrido en el que se evidenció una descoordinación entre ambas figuras.
Isabel II recibió a Donald y Melania Trump en el patio interior de la residencia real, ubicada en el condado de Berkshire. Posteriormente, una compañía de la Guardia Real, rindió honores de ordenanza y se interpretó el himno de de los Estados Unidos, tras lo cual ambos jefes de Estado pasaron revista a las tropas.
Un recorrido peculiar
Al inicio de su caminata ante las tropas, la reina Isabel le hizo un gesto a Trump para que camine e intentó colocarse a su izquierda para el recorrido. El presidente de Estados Unidos comenzó a caminar, pero se detuvo súbitamente, ante lo que la reina tuvo que volver a ponerse a su derecha para poder avanzar. Concluida esta ceremonia, Isabel II invitó al matrimonio Trump a tomar el té en el castillo.
La reunión con la reina es el último acto oficial de Trump, quien se trasladará a la ciudad escocesa de Glasgow para pasar el fin de semana, ya en visita privada. Por la mañana, el mandatario se reunió con la primera ministra británica, Theresa May, con la que limó asperezas tras la polémica entrevista publicada este viernes en el diario The Sun. De forma paralelea, decenas de miles marcharon en Londres en rechazo a las políticas del Gobierno estadounidense.
(Con información de EFE)
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