Un ventarrón en Río de Janeiro causó estragos sobre la inmensa estructura de cerca de 85 metros de altura.
Un ventarrón que sorprendió a la ciudad brasileña de Río de Janeiro partió en dos la estructura metálica en construcción del que será el mayor árbol flotante de Navidad del mundo, informaron sus responsables.
El accidente se produjo exactamente una semana antes de la inauguración del llamado Árbol de Navidad de la Lagoa, una estructura flotante de cerca de 85 metros de altura, equivalente a un edificio de 28 pisos, que todos los años es montada en la laguna Rodrigo de Freitas, en la zona sur de Río de Janeiro.
Los vientos de la madrugada, que alcanzaron unos 31 kilómetros por hora en la región, derrumbaron la parte superior de la estructura que estaba siendo montada en la orilla de la laguna y que este viernes sería trasladada al centro de la misma.
La instalación metálica, que es montada desde hace veinte años por un banco privado, ya fue registrada en el libro Guinness de récords como el mayor árbol de navidad flotante del mundo.
La empresa responsable por el montaje informó de que sus ingenieros aún están evaluando la extensión de los daños para determinar las reparaciones, pero que la inauguración del árbol, inicialmente prevista para el 28 de noviembre, quedó aplazada para una fecha aún indefinida.
La inauguración del árbol, un evento que todos los años atrae multitudes, tenía prevista la presentación de diferentes grupos musicales y de danza.
En su vigésima edición, el árbol contará este año con cerca de 3,3 millones de microlámparas y 100 reflectores LED, programados para formar diferentes figuras al ser encendidas, entre las cuales plantas, flores y diseños navideños.
La base de la estructura, de 810 metros cuadrados, cuenta con once gigantescos flotadores de metal de 2,44 metros de altura y que pesan entre 12 y 16 toneladas cada uno.
EFE
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