Los delincuentes secuestraron al joven de 23 años en su país natal y lo llevaron hasta un pueblo en Bolivia, donde lo golpearon y le aplicaron descargas eléctricas.
La policía de Bolivia liberó a un joven chileno que se encontraba secuestrado en ese país por una banda de delincuentes que lo torturó duramente, informó este viernes el gobierno.
El hombre de 23 años había sido secuestrado el 26 de diciembre en el poblado de Iquique, en el norte chileno, y trasladado a territorio boliviano, donde fue golpeado y torturado por un grupo formado por cuatro bolivianos y un colombiano. En esas condiciones permaneció hasta el jueves, día en que fue rescatado en la ciudad de Cochabamba (centro), cuando un miembro de la banda intentaba cobrar 5 000 dólares, parte del monto del rescate que los captores habían pedido a la familia.
"(El secuestrado) ha sido internado a territorio nacional, trasladado inicialmente a la localidad (fronteriza) de Sabaya, torturado y filmado para enviar las imágenes a sus familiares a objeto de exigir el pago de una suma de 10 millones de pesos chilenos (alrededor de 14.500 dólares)", detalló el ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero.
Al momento del rescate, el joven presentaba "lesiones que ha recibido a través de descargas eléctricas y golpes", dijo Vladimir Pol, jefe de la policía de la región de Cochabamba, según el canal de noticias Bolivisión, que difundió imágenes del joven siendo torturado. Según Pol, el móvil del delito es "extorsivo y económico", aunque no se descartan otras causas. Tras su liberación, el joven recibió asistencia de Interpol para poder regresar a su país, mientras que los cuatro bolivianos (entre ellos dos mujeres) y el colombiano fueron detenidos.
Enviados a prisión
Un juez determinó el mismo viernes el encarcelamiento preventivo de cuatro acusados del secuestro y el arresto domiciliario para la otra imputada por estar embarazada, informó la Fiscalía General del Estado boliviano. Los cinco fueron imputados del delito de secuestro agravado, después de que el Ministerio Público "logró demostrar la probabilidad de autoría", añadió.
"Los elementos de la investigación fueron los mensajes del WhatsApp, medio por el que exigieron el dinero a los familiares para el rescate, la amplia declaración de la víctima y la fotografía del depósito bancario que se realizó en favor de uno de los imputados", indicó el fiscal del caso, Hugo Espinoza, citado en el comunicado. Además, se sacaron imágenes del video en que "se observa la tortura a la víctima, para establecer que hubo las agresiones físicas y el secuestro", agregó la Fiscalía.
Según la investigación, el pasado miércoles la Policía Boliviana recibió la denuncia de una persona que aseguraba que su hermano Robinson C. C. había sido secuestrado. "También se conoció que la familia entregó la suma de 5.000 dólares a los supuestos secuestradores para la liberación de la víctima", relató, de unos 20.000 que supuestamente pedían en total.
(Con información de AFP y EFE)
Comparte esta noticia