La más alta instancia de la justicia brasileña rechazó este miércoles el hábeas corpus que buscaba evitar que el expresidente cumpla la sentencia de 12 años dictada en su contra. Ahora tiene seis días de plazo para un último recurso.
La Corte Suprema de Brasil rechazó este miércoles un habeas corpus presentado por la defensa del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y le abrió así las puertas de la cárcel al líder más popular del país, condenado a doce años de prisión por corrupción.
La negativa del recurso que podría al menos haber postergado el encarcelamiento de Lula fue ajustada y se definió por seis votos a cinco, un resultado que dejó en evidencia las serias discordias que concitó un caso que fue objeto de un enconado debate que duró casi once horas.
No obstante, pese al fallo de este miércoles, el líder del Partido de los Trabajadores no irá a la cárcel de inmediato.
"No será detenido de inmediato porque lo que juzgó el STF es un habeas corpus que autoriza la expedición de una orden de prisión", explicó a la agencia AFP el criminólogo Jovacy Peter Filho. Quedan aún por analizar "posibles nuevos recursos en el TRF4 y solo entonces podría llegar la orden del juez Sergio Moro", añadió.
Moro es el magistrado de primera instancia que desde su despacho de Curitiba (sur) se convirtió en ícono de la lucha contra la corrupción para muchos brasileños. De su pluma salieron la condena contra el expresidente y contra otros políticos y empresarios enredados en la Operación Lava Jato.
Último recurso
La decisión de enviar a Lula a prisión queda ahora en manos del Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región de Portoalegere (TRF4), corte de segunda instancia que amplió de nueve a doce años la pena dictada por un juez inferior y ante la cual cabe aún un recurso para revisar la redacción de la sentencia, pero no el contenido.
El expresidente brasileño tiene plazo hasta el 10 de abril para presentar esta última carta que los expertos consideran como una mera formalidad a la que no le vaticinan éxito.
El analista político y catedrático de la Universidad Paulista, Gustavó Segré dijo a RPP Noticias que la defensa de Lula probablemente busque ganar tiempo con este recurso, quie a lo mucho "podría agotarse" en los próximos 10 a 15 días.
"Lo cierto es que a la luz de la resolución de hoy Lula pordría ir preso a partir de que este recurso sea cumplido y que el tribunal regional (TRF4) publique la sentencia en segunda instancia", comentó.
¿Milagro jurídico?
Ante la posibilidad de que exista una mínima esperanza para que Lula se libre de la cárcel, Segré dijo que "siempre existen milagros políticos y jurídicos" pero "hasta el momento todos los milagros le fueron denegados" al exmandatario brasileño.
Dijo que aunque "siempre existe la posibilidad que hayan acuerdos que uno no conoce" considera que "la situación de Lula está cada vez más comprometida".
El tribunal de apelaciones (TRF4) ha informado que la detención de Lula podría producirse a partir de la semana próxima, una vez que su defensa presente sus últimas objeciones, si es que decide hacerlo.
La asesoría del equipo de abogados del exmandatario dijo a la agencia AFP que esa posibilidad estaba bajo análisis. (Con información de EFE y AFP)
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